Señoras y Señores,

Bienvenidos a Circus Day

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Hola,

Soy Caty y dirijo este circo

Foodie, diseñadora gráfica, cuentacuentos y aficionada a la fotografía es un resumen de lo que encontrarás aquí, un circo lleno de recetas, historias y espectáculo. Señoras y señores, mesdames et messieurs, ladies and gentlemen, bienvenidos a Circus day, espero que te guste el show.

Hi, I'm Caty and I lead this circus.

Foodie, graphic designer, storyteller and photography amateur is a summary of what you will find here, a circus full of recipes, stories and spectacle. Señoras y señores, mesdames et messieurs, ladies and gentlemen, welcome to Circus day, I hope you like the show.

The Show

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Mallorca
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Navidad

En el blog

Tristán


Primer lunes de mes y un grupo de blogueros estamos convocados a vivir una experiencia maravillosa, el prestigioso chef Gerhard Schwaiger nos dará una máster class que nos ha dejado a todos muy buen sabor de boca. Los mallorquines conocemos el restaurante Tristán, por su fama con 2 estrellas Michelin, y por su ubicación en uno de los puertos más exclusivos de la isla.

Ahora Tristán empieza otra etapa, dejando atrás sus estrellas, pero quedándose la maravillosa magia que sale de su cocina. Ha dicho adiós al pasado, se ha renovado y adaptado a estos tiempos sin olvidar la cocina mallorquina. Schwaiger, manteniéndose fiel a su estilo y a la calidad de las materias primas, se deshace de las normas de la alta cocina y nos deleita con una cocina mediterránea al alcance de todos.



No os podéis imaginar la emoción que un chef de su categoría nos de una Master class, fue tan divertido, emocionante y delicioso, qué creo se nos ve a todos caras de felicidad, y es que no podía ser de otra manera. Nos reunimos unos cuantos blogueros y nos metimos en la cocina, que eso es otro mundo, nada que ver con las cocinas que tenemos en casa, y Schwaiger desplegó su magia y nos hizo sentir cómo si estuviéramos formando parte de una orquesta maravillosa. Esos tips que nos enseñó no creo que se nos olviden fácilmente, él ya nos contó que podíamos usarlos en casa, ahora ya no será lo mismo cocinar lubina a la sal, o un solomillo perfecto.




El postre no lo preparamos nosotros pero dimos buena cuenta de él, jeje, fue una cena temprana que disfrutamos todos, además el chef nos acompañó y resolvió todas las dudas que iban surgiendo, eso es de categoría.


Simplemente maravilloso

@catypol

Spaghetti integrales al limón

Si alguna vez contara que tuve la suerte de conocerte nadie me creería, nos sentábamos cerca del limonero que teníamos en el jardín, y me contabas las historias que vivías y que veías por el mundo. Mis ojos, llenos de admiración brillaban de envidia y soñaba que algún día me tocaría a mi vivirlo. 

No pensé que mis historias serían diferentes, ignorante de mi, tanto soñaba en las tuyas que olvidé vivir las mías propias, entre enfadada por no ser iguales y decepcionada por la diferencia dejé pasar un tiempo valioso que nunca más volvió. 

A veces es tan simple como dejarse fascinar por los aromas de un simple limonero y quedarse en silencio escuchando madurar los limones, ese punto de acidez ya se encarga la vida de ponerlo. 



El toque ácido del limón en el aliño de las ensaladas, el aroma de la piel rallada en los bizcochos, esa frase tan popular: si la vida te da limones, o esa limonada fresquita en verano que tanto nos gusta, ¿verdad qué es un fruto que puede contarnos historias? ¿qué forma parte de nuestro equipaje culinario, qué es básico y muy apreciado?. Esta vez es uno de nuestros ingredientes principales, y lo hemos convertido en un plato muy sabroso, fresco y sorprendentemente suave al paladar.

Esta es mi aportación salada al nuevo recetario de primavera verano de Cocina Prêt à porter by Kuki Square, de recetas con frutas.

· SPAGHETTIS INTREGRALES AL LIMÓN ·

Ingredientes

  • 320 gr. Espaguetis integrales
  • 2 limones
  • 250 gr. Parmesano rallado
  • 60 gr. Rúcula
  • 200 gr. Crème fraîche
  • Sal y pimienta negra

Elaboración
En una olla con abundante agua hirviendo con sal, cocinamos la pasta, unos 8 minutos al dente.
Mientras la pasta se cocina rallamos la cáscara de los limones y la mezclamos con el parmesano rallado. Limpiamos la rúcula y la picamos en trozos más o menos grandes, también añadimos la rúcula al parmesano y al limón. 

Exprimimos el zumo de un limón y añadimos a la mezcla anterior. Cuando la pasta esté cocida, colar y mezclar rápidamente con la rúcula, el parmesano y el limón, lo removemos para que se impregne la pasta y el queso se derrita y le añadimos la crème fraîche. Removemos bien y le añadimos un poco de pimienta negra. Servimos inmediatamente.


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Relato y fotografías @catypol - Circus day.

Trifle cake

El revuelo que despertó el que en su momento fue conocido como «El misterioso caso de Styles» se ha calmado. Sin embargo, en vista de la resonancia mundial que tuvo, mi amigo Poirot y la propia familia me han pedido que escriba toda la historia. Confiamos en que así se acallen definitivamente los rumores sensacionalistas que aún perduran. Por lo tanto, expondré con brevedad las circunstancias que me llevaron a verme implicado en este asunto. Me habían enviado a Inglaterra tras caer herido en el frente y, después de pasar unos meses recuperándome en una deprimente clínica, me concedieron un mes de permiso. No tenía parientes cercanos ni amigos, ni siquiera había decidido lo que haría, cuando me encontré con John Cavendish. Le había visto muy poco en los últimos años. En realidad, jamás le conocí a fondo. Me llevaba unos quince años, aunque no representaba los cuarenta y cinco que tenía. Sin embargo, durante mi infancia a menudo me alojé en Styles, la residencia de su madre, en Essex. Fragmento de El misterioso caso de Styles (Agatha Christie).



Nacida en época victoriana, nos hizo tomar té a todos los que en su momento la hemos leído. Si esa época es conocida por los cambios extraordinarios que marcaron el país, ella lo fue por su vida, se alistó en el ejército y aprendió sobre venenos y pócimas que después nos descubriría en sus textos. Describía las escenas y nos hacía involucrarnos en ellas, todos veíamos en nuestras mentes, mientras leíamos, a una señora mayor, que veía todo tan claro que aún sin acabar el libro ya sabía quien era el asesino. O ese Belga y su bigotillo peculiar. Y esa pareja joven, que se conocieron en una guerra, corrieron aventuras siempre juntos y tan enamorados.

Sentémonos en una cómoda butaca, junto una taza de té inglés, un trocito de este rico pastel y disfrutemos de la intriga de un suceso que página a página nos hará olvidar en la época en que vivimos, y nos llevará a la época en que este pastel era servido en esas mesas con viandas a veces escasas, tanta guerra nos hará pasar algo de hambre, por lo que los restos de algo de fruta, de bizcocho, nata, crema, creará unos de los mejores postres que se hace en los países anglosajones y que en Circus day hemos decidido presentarlo así. 


· TRIFLE CAKE ·

Ingredientes
  • 1 naranja de zumo limpia y cortada a trocitos
  • 180 gr. Azúcar
  • 3 huevos
  • 100 gr. AOVE Señorios de Relleu
  • 1 yogur
  • 250 gr. Harina repostería
  • 1 sobre de levadura en polvo
  • 1 pellizco de sal
  • Flan o crema pastelera
  • Nata montada azucarada
  • Frambuesas
  • Grosellas
  • Mango crujiente

Elaboración
Engrasamos un molde de 20 cm. o bien con spray para ese uso o bien con mantequilla y harina. Precalentamos el horno a 180º C.

En un cuenco ponemos los trozos de naranja, el azúcar y los huevos y trituramos hasta que la masa blanquee y la naranja sea completamente puré. Le añadimos el aceite y el yogur, mezclamos con la batidora durante unos segundos. Añadimos la harina cernida, la levadura y la sal y removemos con una espátula hasta que toda la mezcla quedé sin grumos y esté bien integrada.

Rellenamos el molde con el preparado y horneamos durante 30 minutos o hasta que al insertarle un palillo, éste salga limpio.

Cuando esté frío desmoldamos. Con un cuchillo hacemos un círculo en el centro del bizcocho sin llegar al fondo (ver dibujo de arriba), solo le sacaremos una parte del centro, lo justo para rellenarlo con el flan. Antes de rellenar el centro con el flan, lo rellenamos con las frambuesas, después le añadimos el flan y sobre éste terminamos de rellenar con más frambuesas. Si el flan estuviera todavía caliente, dejaremos el bizcocho relleno dentro del frigorífico para que se enfríe todo bien.

Sobre las frambuesas, añadimos la nata montada haciendo que corone el bizcocho, y encima de la nata montada esparcimos a nuestro gusto grosellas y mango crujiente. 

Dejar en el frigorífico hasta la hora de servir.


Si en lugar de flan te decides por crema pastelera puede pasar que se hunda con el peso, el flan queda más firme, o haz lo que yo no hice, dejar más base para que aguante el peso. Y por supuesto no hace falta que diga que la fruta puede ser cambiada por la que más te guste o la que tengas en casa. 

Nota de Agatha: no hace falta que le pongas veneno, todos caerán "muertos" de gusto una vez que lo hayan probado. ¡Y recuerda no siempre la culpa es del mayordomo, en este caso la cocinera tiene mucho que ver.

Esta es mi aportación dulce al nuevo recetario de primavera verano de Cocina Prêt à porter by Kuki Square, de recetas con frutas.


Receta y fotografías @catypol - Circus day.

Canelón de rabanitos relleno

Isabella encontró en el desván de la casa de su abuelo un antiguo libro lleno de secretos sobre las criaturas mágicas y los métodos ancestrales para volar. Con ojos brillantes y una determinación inquebrantable, comenzó a estudiar el arte de volar con la ayuda de las antiguas enseñanzas.

En un pequeño pueblo rodeado de campos verdes y un vasto cielo azul, vivía Isabella que soñaba con volar. Desde que era una niña, miraba maravillada a las aves que surcaban el cielo, deseando poder unirse a ellas algún día. Sin embargo, su familia estaba preocupada por la seguridad de sus sueños y la instaban a abandonar esas ideas fantasiosas. Pero Isabella tenía un aliado incondicional: su querido abuelo, Don Emilio. Vivía en una acogedora casa cerca del campo de rabanitos que cultivaba con amor. 

Don Emilio, al enterarse de la búsqueda de su nieta, decidió unirse a ella en su aventura. Recordando las historias que le contaban de su propia juventud, conocía algunos secretos que podrían ayudarla a cumplir su sueño. Juntos, comenzaron a experimentar con diferentes métodos, desde cometas hasta planeadores improvisados hechos con tela y palos.

La familia seguía preocupada, pero cada día Isabella y su abuelo se sumergían más en su búsqueda compartida. Pasaban horas entre risas y desafíos, explorando las maravillas del campo de rabanitos mientras perfeccionaban sus creaciones. Los días se convirtieron en una mezcla de magia y aprendizaje, con el abuelo alentándola a seguir sus instintos y a no tener miedo de caer.

Finalmente, después de muchas pruebas y errores, llegó el día en que Isabella sintió que estaba lista para volar. Con un artefacto peculiar, una mezcla de ingenio y magia, se elevó en el cielo junto a las aves que tanto admiraba. El abuelo, desde abajo, aplaudió con lágrimas en los ojos al ver el éxito de su nieta.

A partir de ese día, Isabella se convirtió en la leyenda del pueblo, una joven que desafió la gravedad y encontró la libertad en el cielo. La familia, inicialmente preocupada, comenzó a comprender la importancia de seguir los sueños y permitir que cada individuo experimente la vida a su manera.

La historia de Isabella se convirtió en un cuento que los abuelos del pueblo contaban a sus nietos antes de dormir, recordándoles la importancia de la determinación, el amor y la libertad para perseguir sus sueños, incluso cuando parecían imposibles. Y en el campo de rabanitos, donde Isabella aprendió a volar, las risas y el amor perduraron en cada rincón, contagiando la magia de un sueño que se hizo realidad.




Descubrimientos simples que me hacen vibrar de emoción tanto como las recetas antiguas, experimentando después en mi cocina para ver si el descubrimiento es posible en las cocinas de todos, o solamente es posible en las cocinas de algunos, y es evidente que en este caso vale la pena, el resultado me gustó mucho, y el descubrimiento viene de la mano del chef Wylie Dufresne y funciona. 

Uno de mis platos preferido es"s'arròs sec", y bueno, recuerdo que los domingos (todos) eran día de arroz, y en tiempo de rabanitos lo acompañábamos con los mismos. Pues bien, cuando descubrí que fácilmente podía hacer una plancha de rabanitos gracias a la gelatina, ¡ya ves qué fácil! no tuve duda de que los rellenaría. Pero en esta entrada la importancia no la tiene el arroz, en esta entrada lo que de verdad importa es la simplicidad de unos ingredientes para llegar a un sorprendente resultado. 

· CANELONES DE RABANITOS RELLENOS ·

Plancha de rabanitos
  • Rabanitos
  • 2 g de Agar agar
  • 150 ml agua

Utensilios
  • Mandolina
  • Pinzas o palillos
  • Papel de horno

Para el relleno
  • "Arròs sec" de verduras

Elaboración
Cortar con una mandolina en rodajas muy muy finas los rabanitos, si no las cortamos tan finas la gelatina no nos hará de pegamento. Diluir el Agar agar en el agua, en frío, y llevar a ebullición, cuando hierva sacar del fuego, con unas pinzas o palillos, introducir rodajas de rabanitos dentro de la gelatina, remojarlas bien, sacarlas e ir colocándolas superpuestas sobre papel de hornear formando un rectángulo. Trabajar rápido con la gelatina, a medida que se enfría no podemos usarla. Además de todo esto yo he terminado pincelando un poco de gelatina sobre la plancha.
Una vez que la plancha de rabanitos se ha solidificado bien podemos cortar a medida para hacer el canelón que queramos para rellenar.




Ahora podré experimentar con otros vegetales, imagino con esa remolacha tan linda o con zanahorias, o también con frutas, por qué no? ya que estamos se abren muchas variantes deliciosas y muy sanas. En esta para darle más sabor, le puse unas gotas de limón al agua del Agar agar, para darle el toque que le solemos dar al arroz, así hacer el plato completo.

¿Y qué haces con los rabanitos que nos queden?, ¿esos trocitos que nos sobren?. A mi me gustan mucho en ensaladas, encurtidos o naturales, no me importa, son deliciosos. Yo lo puse en vinagre para la ensaladas, solo tuve que hervir un poco de vinagre de manzana, unos 100 ml, 200 ml de agua, no le puse bolitas de pimienta negra ya que no tenía y después lo añadí junto con los trocitos de rabanito en un bote esterilizado.


























Fotografías @catypol - Circus day.

Tarta salada

Antonia es enfermera en el centro de salud de Lorena, tiene mucho carácter cosa muy notable cuando se enfada aunque es más conocida como Santa Paciencia, porque la tiene, es paciente cuando Don Felipe la señala con el dedo cuando se ha equivocado de día y acude a la cita con el médico un día antes de lo que le toca, ¡ah, Santa Paciencia!, o cuando Luís se resfría por haber estado esperando, bajo la lluvia, a que su novia le perdone llegar tarde a la cita del sábado, entonces Luís le llora las penas a Antonia mientras espera que el médico le atienda, ¡ah, Santa Paciencia!, ella deja escapar una risita tonta cosa que desconcierta a Luís.

Antonia es bajita, rubia con ojos azules, mejillas sonrosadas y siempre lleva los labios pintados de rojo pasión. Suspira a menudo, cuando la sala de espera está vacía es lo único que se oye, suponemos que esos suspiros son la manera de gestionar las palabras que no dice pero que sí piensa. El Dr. Manuel la anima que no se reprima y ella deja escapar una risita tonta cuando él se lo propone, cosa que desconcierta al doctor.

Cada domingo, después de misa acude al bar del pueblo a comer un trocito de tarta salada y una copa de vino, allí se encuentra con todos los pacientes que en algún momento dado de su vida han ido y van a verla, saben que no deben molestarla cuando es su día libre, creen que deja la Santa paciencia en el centro de salud y no tiene paciencia en gritar a quien la moleste mientras come, eso desconcierta a los lugareños y ella deja escapar una risita tonta.



Hoy me apetece que la receta sea muy visual, me apetece que me digas si solamente con ver las fotografías paso a paso se ve claramente la receta, yo solo escribiré los ingredientes que he usado, la elaboración me parece evidente, pero si no es así me gustaría me lo contaras, que me lo preguntaras, en esta entrada se tú el protagonista si te apetece, cuéntame que fotografía le falta para entenderlo o si te parece bien, aunque también debajo dejaré algunas notas. 

Por mi parte diré que es una receta muy fácil, que puedo comer en mi dieta por que cuando la hago adapto el peso de los ingredientes, evidentemente Tomás y yo no nos comemos una tarta de 20 cm. de diámetro pero si compartimos una de 12 cm. de diámetro, y que está tan rica que voy a pasarme experimentando con otros rellenos, ya me entenderás.


· TARTA SALADA CON PATATAS ·

Sin gluten

Ingredientes para molde 20 cm 
  • 500 gr patatas
  • 200 gr acelgas
  • 1 manojo cebolletas
  • 4 huevos M
  • 250 gr queso fresco batido desnatado
  • 100 gr queso Gorgonzola
  • Ralladura de 1 limón
  • 1 cucharada AOVE Señorios de Relleu (usar para saltear la verdura)
  • Sal y Pimienta negra
Tiempo de horneado de la patata: 180º C - 10 minutos.
Tiempo de horneado de la tarta: 180º C - 40 minutos.

Elaboración:




Notas:
¡CUIDADO! no "twittees" mientras estás horneando las patatas, mejor que no se tuesten mucho, por experiencia lo digo...y sí, si te gustan más fritas las puedes freír.
¿Grosor del corte de la patata con la mandolina?, si tienes buen pulso y quieres hacerlo a cuchillo, ¡ánimo! a 3-4 mm. sea como sea.
¿Qué haces con el tronco de las acelgas? pues para la crema de verduras, o para asar a la plancha, para mezclar con otras verduras en el wok, rebozados y fritos.


Fotografías y vídeo @catypol - Circus day.

Mattentaart

Habían decidido conocerse en un concierto de Tomorrowland, a ambos les gustaban los DJs y eso les unió, así que después de muchos mensajes creían firmemente que esa era su oportunidad de verse y ver si las fotos que se habían enviado eran ciertas. Habían quedado que cada uno llevaría una pancarta con el título de la canción que más les gustaba, a ella le gustaba Sunset, el atardecer rojo, los últimos rayos de sol, la despedida del día y ahora su canción favorita, no podría asegurar qué canción habría elegido él pero ella creía que sería The End, él le había dicho que a veces el final de algo puede ser el principio de otro algo.

Mi pancarta estaba pintada con un bonito atardecer, yo iba vestida con unos vaqueros un poco rotos con mi camiseta de la suerte verde esperanza y mis zapatillas blancas gastadas de tanto llevarlas, una mariposa en mi pelo y un chicle sabor sandía, ¡qué ilusión!. Él iba vestido con unos vaqueros negros y una camiseta blanca, deportivas rojas y un pendiente en la oreja, además del pelo cortísimo negro como el Betún. Su pancarta era negra, con una tipografía roja que ponía Demon, me hizo reír, y él rió conmigo, ¡qué ilusión!.

Fue una noche inolvidable, una pareja maravillosa y un concierto lleno hasta los topes, nos gustamos, nos besamos, bailamos juntos y separados, reímos y nos llenamos de Mattentaart, a tope, ¡qué ilusión!.



Con motivo del concurso bloganiversario de Aurélie descubrí un postre que por lo visto está protegido legalmente y etiquetado con la indicación geográfica de la Comisión Europea. La Mattentaart de Geraardsbergen. ¡Sorpresa!, para mi claro, después de estar barajando que receta flamenca podría presentar al concurso, me apetecía algo dulce pues las últimas entradas son saladas, y encontrarme esta referencia me decantó por ella.

Mattentaart es un pastel pequeño, aunque por la red he visto muchas versiones, y muchas recetas. Lo que saqué en claro, es que se usa leche cuajada, almendra, hojaldre y huevos, así que al final lo hice a mi manera, creo que el resultado os lo puedo presentar sin ningún tipo de problema ya que es una delicia. La receta está sacada de una página de turismo de Bélgica, pero yo lo cambié un poco pues no se entiende muy bien, hay ingredientes que en la elaboración no aparecen y es algo caótica, a rehacer la versión, bueno no tanto solo un poquito, y así fue, la mía es fácil, fácil y muy rica. 
Espero un día llegar a visitar esa ciudad y probarlas allí.

· MATTENTAART ·
Sin gluten

Ingredientes 
  • 2 masas de hojaldre SIN GLUTEN
  • 200 gr. de cuajada (de buena calidad o preparada en casa)
  • 25 gr. de azúcar (si te gusta muy dulce recomiendo los 50 gr.)
  • 2 huevos M
  • 45 gr. almendras molidas
  • 5 ml. ron o unas gotas de extracto de almendra
Elaboración
Si eliges hacer la cuajada en casa debes prepararla un día antes, seguir las instrucciones del fabricante, si la has comprado salta este paso. Precalentar el horno a 225º C. Preparar los moldes untando manteca y espolvorear harina. Cortar y adaptar la masa de hojaldre al molde que hayas elegido, piensa que estas tartaletas van cerradas por lo que también hay que hacer lo mismo para la tapa.
Para el relleno, separar las claras de las yemas, de los huevos, y montar las claras a punto de nieve. Verter las yemas en el vaso de la batidora junto con el azúcar, la cuajada, el ron o el extracto de almendra y la almendra molida. Batir. La crema resultante mezclarla con las claras, remover bien para que quede bien integrada. Repartir la masa entre los cuatro moldes y con la tapa que has recortado tapar los mismos, debes presionar bien los bordes para que al hornear no se abran. También hacer un pequeño agujerito en las tapas. Hornear durante 30 minutos. Sacar del horno, y con cuidado sacar las Mattentaart de los moldes. Dejar enfriar. (A mi me gustaron más al día siguiente que recién hechas).






Relato y fotografías @catypol - Circus day.

Pastel de pescado

La princesa está triste, ¿qué tendrá la princesa?. Así que un día se escapó decidida a recorrer la ciudad sin sirvientes, y a su aire, igual que si estuviera de vacaciones, sin agendas, ni protocolo, ni horario marcado. Pero no contó con él, no contó que él la cautivaría con sus palabras, con aventuras, que de otra manera jamás habría vivido, y con su atractivo. Ninguno dijo la verdad hasta que llegado el momento eran los sentimientos los que sin decir nada hablaban, no tuvieron que decirse mucho para saber cuál era el lugar de ambos, una historia que no podía terminar de otra manera.

Vacaciones en Roma fue la primera película que hizo la actriz Audrey Hepburn en el cine, y con ella ganó un Oscar a la mejor actriz principal, y con ella se hizo famosa. Rodada en 1953, en la ciudad de Roma, con escenarios auténticos, nos enseña una ciudad llena de luz y bullicio tan característico de los países Mediterráneos.

Nuestra querida Mon del blog April's Kitch, celebra su tercer aniversario, y nos propone celebrarlo con ella con un particular concurso con el que he disfrutado de principio a fin. Primero eligiendo la película, que deben ser entre los años 50 y 65, y habiendo visto de pequeña en el ciclo de cine en blanco y negro peliculas de esos años me emocionó mucho. Elegí esta película por la protagonista, dijo en alguna ocasión que ésta era una película especial para ella, además fue el inicio de una bonita amistad con Gregory Peck, y se nota la complicidad de ello en el film. A mi me encanta subida en la famosa Vespa, con esa cara de alegría, también en esta película se corta el pelo y disfruta de las cosas simples de la vida.

Pero tengo que decir que en esta película comer comen poco, la verdad, ella come un helado en la plaza de España, o pide una copa de champán, en un bar, y él un café frío. Así que mi querida Mon, nos pedías creatividad para impresionar, y yo, siendo Roma (el municipio que no la capital) bañada por el mar Mediterráneo, decidí usar uno de los frutos de este mar para hacerlo, eligiendo un pescado delicioso y colorido para que la receta presentada sea no solo deliciosa al paladar si no que también fuera bella a los ojos de todos. Además, esta receta la acompaña la película (vídeo receta), que en este caso, como yo he tenido que grabarlo ha sido Tomás el que ha seguido mis directrices para realizar la receta.



Título: Pastel de pescado

Director y editor: @catypol
Música: Michael Chapman
Reparto: Tomás
Duración: 7:15 M
Sinopsis: Se trata de una receta sencilla, con ingredientes de buen precio para todos, que si el pescado es fresco mejor pero si no es así y es congelado también va bien. Y que es tan fácil y delicioso que puede hacerlo hasta los que no se atreven a cocinar.  El final siempre es degustarlo en compañía y con amor.



 · PASTEL DE PESCADO ·

Ingredientes

  • 16 Lomos de salmonete para este molde de 21,5x11cm
  • 230 gr. merluza 
  • 230 gr. gambón
  • Aceite de oliva
  • 150 gr. cebolla
  • 2 ajos
  • 3 huevos L
  • 1 cucharada harina
  • 1 tacita caldo de pescado o verduras
  • Manteca de cerdo
  • Sal y pimienta

Elaboración
Mise en place: Limpiamos el pescado, en caso de que sea necesario. Cortamos a trozos la merluza y el gambón, reservamos 3 gambones para decorar. Picamos la cebolla y los ajos. Batimos los huevos.
Enmantecamos el molde, con manteca de cerdo (la consistencia hará que se peguen con más facilidad los lomos al molde, cosa que con el aceite no pasará). Vamos colocando/pegando los lomos de los salmonetes, a la pared del molde enmantecado, quedando la parte rosada (piel) hacía la pared del molde. Cuando los tenemos todos colocados, en la base del molde colocamos 3 gambones (si el molde fuera más grande se pondrá más cantidad, tanto de salmonetes como de gambones). Dejamos el molde preparado en el frigorífico mientras hacemos el relleno.

Ponemos aceite de oliva en la sartén, cuando esté caliente sofreímos la cebolla y los ajos. Cuando transparenten, le añadimos la harina, removemos hasta que la harina se cocine, removemos para que no se nos queme. Cuando la harina está tostada le añadimos el caldo, y removemos hasta que espese. Sacamos de la sartén y la ponemos en un plato para que enfríe. Precalentamos el horno a 180º C. Preparamos una fuente para baño María, y calentamos agua.

Una vez fría le añadimos el pescado cortado a trozos y el gambón, removemos, salpimentamos y le añadimos los huevos batidos,  y mezclamos todo el preparado. Sacamos el molde del frigo. Vertemos dentro la mezcla de pescado y huevos. Tapamos con un poco de papel de alumnio. En la fuente (para el baño María) le vertemos agua hirviendo (cuidado no quermarse), y le colocamos el molde dentro del agua. Horneamos durante 1 hora, o hasta que el relleno esté cuajado.

Servir caliente, a temperatura ambiente o fría, eso ya depende del gusto de cada uno. A mi me gusta a temperatura ambiente, que no esté fría del frigorífico. Acompañamos con verdura, o con ensalada, o con mayonesa, salsa rosa, eso también va a gusto. 

Nota: Esta es una receta mallorquina, solo que antiguamente se hacía con pescado que ahora no es tan asequible como lo era antes, y por supuesto hecha con producto totalmente Mediterráneo: cap roig (cabracho), langosta y salmonetes.


¡Ah! y con Champán o cava, para brindar por este maravilloso aniversario de April's Kitch. ¡Feliz cumple blog, qué cumplas muchos más!. 

Con esta receta participo en el concurso cocina de cine


Fotografías y vídeo: @catypol - Circus day.

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