
Dificultad: Media
Para 500 gr. de buñuelos


Foodie, diseñadora gráfica, cuentacuentos y aficionada a la fotografía es un resumen de lo que encontrarás aquí, un circo lleno de recetas, historias y espectáculo. Señoras y señores, mesdames et messieurs, ladies and gentlemen, bienvenidos a Circus day, espero que te guste el show.
Hi, I'm Caty and I lead this circus.
Foodie, graphic designer, storyteller and photography amateur is a summary of what you will find here, a circus full of recipes, stories and spectacle. Señoras y señores, mesdames et messieurs, ladies and gentlemen, welcome to Circus day, I hope you like the show.
Sor Inés y Sor Margarita eran dos monjas modernas. "Muy modernas". Tanto, que se apuntaron a un congreso de vida contemplativa… en Barcelona. Pero un error en la app de mapas las desvió por completo de su destino espiritual.
—¿Sor Inés, segura que esto es el retiro?
—Lo pone aquí: “Sala de fiestas Celestial”. ¿Será una metáfora?
Entraron. Luces de neón, música a todo volumen y un camarero que les preguntaba si querían un bikini. Ellas, un poco nerviosas, retrocedieron dos pasos… hasta que vieron que a lo que llamaba bikini era un sándwich.
—Ah… era eso —dijo Sor Margarita, sonrojada.
—Menos mal. No sabía qué pensar —murmuró Sor Inés.
Intentaron salir discretamente, pero la app insistía: “Ha llegado a su destino”. Dieron vueltas por el barrio durante una hora, pasando tres veces por el mismo limpiabotas, que ya empezaba a mirarlas ceñudo.
—Madre mía, esto no puede ser lo que el Señor tenía en mente —suspiró Sor Margarita.
—Bueno, el Señor obra por caminos misteriosos… y a veces usa Google Maps —respondió Sor Inés, resignada.
Al final, decidieron volver al convento, doce horas después, con los hábitos arrugados y un poquito enfadadas. La madre superiora les preguntó cómo había ido el viaje.
—Largo. Muy largo —dijeron al unísono.
Desde entonces, recordando aquel día, las dos monjas rezan una nueva oración para los viajes:
“Líbranos, Señor, de los errores de GPS, de los congresos engañosos y de los sándwiches con nombres confusos. Amén.”
Batir en un bol el agua a temperatura ambiente con la sal y tres cucharadas de aceite con un batidor de varillas. La sal debe disolverse del todo, y la mezcla, emulsionar ligeramente.
Añadir la harina tamizada pasada por un colador poco a poco, y seguimos mezclando hasta que quede una pasta cremosa.
Lavar bien las patatas y cortarlas en láminas finas con una mandolina. Añadirlas a la masa y mezclar.
Verter la mezcla en la bandeja y repartir bien. Repartir hojas de romero por encima. Hornear entre 45 y 50 minutos o hasta que esté bien dorado. Sacar del horno, pintar con aceite de oliva y esparcir unas escama de sal. Cortar y servir inmediatamente.