Señoras y Señores,

Bienvenidos a Circus Day

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Hola,

Soy Caty y dirijo este circo

Foodie, diseñadora gráfica, cuentacuentos y aficionada a la fotografía es un resumen de lo que encontrarás aquí, un circo lleno de recetas, historias y espectáculo. Señoras y señores, mesdames et messieurs, ladies and gentlemen, bienvenidos a Circus day, espero que te guste el show.

Hi, I'm Caty and I lead this circus.

Foodie, graphic designer, storyteller and photography amateur is a summary of what you will find here, a circus full of recipes, stories and spectacle. Señoras y señores, mesdames et messieurs, ladies and gentlemen, welcome to Circus day, I hope you like the show.

The Show

[CIRCUS TENT]
La carpa
[CIRCUS RING]
Pista central
[CLOWN BREAD]
Pan-yasos
[SWEET JUGGLING]
Dulces malabares
[FESTIVAL SOMERSAULT]
Festival de piruetas
[LIQUIDS TIGHTROPE WALKERS]
Líquidos equilibristas
[MALLORCA]
Mallorca
[CHRISTMAS]
Navidad

En el blog

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Congee de pollo

Cuando llegaba el frío invierno se metía en capas de ropa, como una cebolla__decía ella, y eso le encantaba, le gustaba sentir el frío aun metida entre esas capas, decía que eso la hacía sentirse viva, con vigor para seguir adelante y notar cada parte de su cuerpo. 

Una vez, cuando su novio rompió con ella y la dejó desolada, sus amigas decidieron viajar a una isla con mucho calor, para divertirse, bailar y beber, beber hasta olvidar. Pero ella no soportaba el calor, tanto calor, decía que la asfixiaba y que hacía que el dolor se quedara dentro, sin poder salir, sin poder quitárselo de encima, el calor la aletargaba, dejaba su interior en pausa y que cuando volviera a la normalidad aún lo llevaría dentro.

Así que se fue de la isla igual que llegó, dolorosa además de quemada por el sol. Juró y perjuró que nunca volvería a quitar penas expuesta al calor. Ella necesita el frío, necesitaba sentirse viva para gritar a los cuatro vientos y en todos los idiomas que sabía, que ella era una guerrera.




El congee son gachas de arroz tradicional muy consumido en Asia. Se obtiene cocinando el arroz durante mucho tiempo en caldo o agua, siendo el grano redondo quizás el más utilizado aunque dependiendo el país también se usa grano largo. Generalmente se sirve solo pero también se le añade pollo, pescado o verduras en la versión salada, pues también existe la versión dulce. Este plato está hecho a menudo para personas mayores o niños que están convalecientes ya que es nutritivo y fácil de digerir. Es un buen desayuno a pesar de que el tiempo de cocción sea largo y también un buen plato para las penas de amor.

En mi versión, como era para comer al mediodía, le he añadido pollo y champiñones, y el caldo también era de pollo, totalmente casero. Y aunque todo lo he cocinado por separado, existe la versión de cocinarlo todo junto, al menos la última media hora de cocción del arroz. Yo prefería pasar la carne y champiñones por la plancha y darle un toque tostado. A la hora de servir lo he presentado con unas gotas de aceite de sésamo pero también le va bien salsa de soja. Es una receta muy sencilla, lo único es el tiempo de preparación que se alarga mucho, pero realmente vale la pena probarlo.

· CONGEE DE POLLO Y CHAMPIÑONES ·

Ingredientes
  • 180 g arroz redondo de grano corto 
  • 2,5 litros de caldo de pollo o agua
  • 1 pechuga de pollo (cocida) finamente fileteada
  • 8 champiñones pequeños, cortados a rodajas finas
  • Jengibre fresco picado
Aceite de sésamo o salsa de soja, para servir
Cebollino fresco cortado pequeño, para servir

La sopa.
  1. Enjuaga y escurre el arroz por 3 veces. 
  2. En una olla lleva a ebullición el arroz con el caldo o agua, remueve, baja el fuego y deja cocinar durante 1 hora, removiendo cada 15 minutos, tiene que quedar una consistencia de gachas. 
  3. Vigila que los granos no se peguen al fondo de la olla.
  4. Mientras con un poco de aceite en una sartén, sofríe el pollo fileteado con los champiñones, termina con el jengibre rallado.

Para servir. 
Reparte el arroz en 4 cuencos, reparte por encima del arroz el pollo con los champiñones, el cebollino y echa unas gotas de aceite de sésamo por encima.

Nota: la sopa puede espesarse más cuando se vaya enfriando, puedes añadir un poco de caldo de pollo para compensar. Y si no le pones soja, añade un poco de sal al caldo.


Relato, vídeo y fotografías @catypol - Circus day

Boloñesa de lentejas

La mamma había estado cocinando todo el día. Las lentejas estaban preparadas para despedir el año, y esta vez sabíamos que decir adiós al pasado nos haría felices. No había sido un buen año, aunque mamá solía decirnos: —¡Podría haber sido peor!. Pero yo no me lo creía.

Mirar hacia el futuro con esperanza es lo que todos hacemos en algún momento de la vida, y en nuestra familia nos levantábamos con esa ilusión cada día. Pero pasar página este año, y hacerlo con dignidad, era la mayor recompensa. La Nonna nos había dejado ese mismo año, y desde que no estaba, parecía que la familia iba a la deriva.

Mi hermano mayor había decidido dar clases de salsa. —¿De verdad? —le preguntó mi madre. —¡Claro, corasón! —le contestó muy serio. Después nos enteramos de que tenía una novia caribeña y nos quedamos tranquilos. Él tenía aspecto de ejecutivo agresivo, y más de una vez habíamos pensado que estaba metido en La Cosa Nostra, así que no pudimos evitar respirar aliviados.

Mi tía abuela iba por su cuarto matrimonio. Bueno, ya era viuda de su cuarto marido, por eso no nos sorprendió que durante el funeral de la Nonna encontrara al quinto novio, y quizás futuro marido, en el cementerio. No, no dentro de una tumba —si es lo que piensas—, sino entre los enterradores. Exactamente, un señor mayor… Lo de "mayor" lo digo por ser amable; hubo un momento en que pensamos que se alojaba en algún panteón. Ella, entre reír y llorar, no desentonaba con él.

Mi hermana pequeña decidió quedarse embarazada. No supimos muy bien por qué. Un año quiso ser enfermera, pero al ver la sangre se desmayó. Se dio cuenta de que si tenía que ver sangre a menudo, no le alcanzaría la vida para curarse todos los chichones de la cabeza. Lo siguiente que quiso ser fue profesora de autoescuela, aunque no tenía carnet de conducir. —¡Pero si no conduciré yo! —nos decía muy resuelta.
No la hicimos cambiar de idea. Ella misma se dio cuenta cuando descubrió que en su lado del coche también había pedales, y que de tanto frenar, se golpeaba la cabeza con el salpicadero. Así que todos pensamos que tanto golpe le debió afectar de algún modo. Mi madre solo le comentó el dolor de cabeza que producen los hijos y no se habló más del tema.

Y el párroco… Que no, no era de la familia, pero como si lo fuera. Había oficiado todos los sacramentos de la familia, por lo que nos conocía bien. Normalmente lo hacía con resignación y humor, sobre todo cuando se trataba de mi tía abuela. Nosotros, a cambio, lo invitábamos a comer después del oficio del domingo. Ese día también estaba allí, cuando mi madre había cocinado lentejas para desearnos un próspero año. Le preguntamos cómo creía que nos trataría el año nuevo. Él nos contestó: —Comiendo muchas lentejas, familia… comiendo muchas lentejas.




“Ser supersticioso es de ignorantes, pero no serlo trae mala suerte”, dijo el napolitano Eduardo De Filippo. La tradición de comer lentejas tiene relación con el hecho de desear suerte y riqueza para el año venidero, y se remonta a la Roma Antigua. Los romanos, regalaban por estas fechas un pequeño bolso de cuero para atarlo a la cintura, y que estaba lleno de lentejas.

Yo tuve mi época odiosa con las lentejas y fue cuando me quedé embarazada de mi hijo mayor cuando las adoré todos los días del embarazo, hasta mi madre me comentaba que creía que había comido más lentejas en esos nueve meses que en todos los años anteriores. En el blog tengo algunas recetas con lentejas que lo demuestran, con remolacha o marineras

Ahora, una boloñesa con lentejas que no dejará indiferente a nadie, si las lentejas no son plato de buen gusto, no pasa nada, pásalas por el turmix y quedará igual que una boloñesa. Espero que te guste el show.

· BOLOÑESA DE LENTEJAS CON CAPELLINI ·

Ingredientes para 4
  • 1 zanahoria grande
  • 1 cebolla grande
  • 3 dientes de ajo
  • Sal y pimienta al gusto
  • 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
  • 2 cucharadas de orégano y albahaca
  • 200 gramos lentejas crudas (en remojo la noche anterior) o 1 bote de lentejas ya cocinadas
  • 100 mililitros de vino tinto
  • 200 gramos tomates triturados
  • 200 ml. caldo de verduras o agua (si hiciera falta)
  • 2 cucharadas de vinagre
  • 350g capellini
  • 6 hojas de albahaca picadas
  • Queso parmesano rallado

Elaboración
  1. Calienta el aceite en una olla. 
  2. Añade el ajo y la cebolla picada, con un poco de sal para que se vaya pochando. 
  3. Para picar la zanahoria muy rápidamente, te traigo un tip: pélala, córtala en cubos y tritúrala en una picadora. 
  4. En menos de 5 segundos estará picada muy pequeña y te ahorrarás muchísimo trabajo.
  5. Incorpora las especias, cocina 2 minutos a fuego fuerte y añade las lentejas junto con el tomate triturado y el vino o el líquido que vayas a utilizar.
  6. Incorpora también el vinagre y deja que se cocine. 
  7. Si has añadido lentejas ya cocidas, tendrás tu boloñesa lista en 15 minutos desde que comience a hervir. 
  8. Si tus lentejas son secas, te llevará unos 30 minutos y muy probablemente tendrás que añadir algo más de líquido hacia el final de la coción, para que no se te pequen y se terminen de cocinar las lentejas
  9. Cuando tu boloñesa esté lista, utiliza, si tienes, una batidora de brazo para darle unos «golpes» de triturado. 
  10. De esta forma las lentejas dejarán de identificarse y la textura se parecerá muchísimo a la de la boloñesa tradicional
  11. Cocina los capellini según las indicaciones del paquete. 
  12. Cuela y sirve junto la boloñesa, la albahaca y el queso parmesano.


Relato y fotografías @catypol - Circus day.

Ensalada de fideos

[RETO COOKING THE CHEF]
El chef nacido en Japón comenzó aprendiendo el arte de hacer sushi, y cuando a la edad de 22 años uno de sus clientes habituales en Tokio lo invitó a abrir un restaurante en Lima, Perú, aprovechó la oportunidad. "Nunca había salido de Japón, y mi sueño era viajar por el mundo", recuerda el Sr. Matsuhisa. "Cuando fui a Perú, me di cuenta de que las diferentes culturas significaban diferentes comidas: estaba tan emocionado de probar su comida y aprender sobre su cultura".

Admite que no recuerda haber querido ser chef. "Tomé la decisión yo mismo. Ahora la generación más joven quiere ser jugador de fútbol, o formar parte de una banda de rock, o cantante o actor, los niños tienen sueños", dice Matsuhisa. "Cuando era niño, mi hermano me llevó a un restaurante de sushi, uno muy tradicional con puertas correderas. Cuando entramos al restaurante, el chef dijo, "Irasshai", que significa bienvenido en japonés. Sentí que había mucha energía e inmediatamente quería ser chef. Por una fracción de segundo, ese fue mi sueño y me comprometí con él".



Estoy muy fuera de plazo para presentar la receta del chef del mes del reto. El chef de este mes el japonés Nobu Matsuhisa y mi amor a su cocina hace que me rinda a su cocina. Con esta receta participo en el reto Cooking the Chef.

He tenido que adaptarlo, la verdad, el miso blanco seco no es fácil de conseguir, en lugar de Yuzu he usado lima y no he usado aceite de trufa ni de semilla de uva porque no tenía, pero me gusta la idea de que llame ensalada a este plato, y si lees la receta sabrás porqué.

· ENSALADA DE FIDEOS CON ALCACHOFAS GREGORIO ·

Ingredientes
  • 150 gramos de fideos
  • 40 gramos de puerros en rodajas
  • Aceite para freír
  • 24 alcachofas baby
  • 1/2 manojo de perejil o rodajas de limón
  • 1/2 cucharada aceite de oliva
  • 1/2 cucharadita aceite de trufa (yo no he usado)
  • Gotas jugo de yuzu (he usado lima)
  • 1 pizca de pimienta recién molida
  • 1/2 cucharada miso blanco seco (yo no he usado)
  • 1/2 cucharada queso parmesano rallado
  • Pizca de sal
  • 1 cucharada de aderezo de Yuzu

Salsa de Yuzu
  1. 3 cucharadas Jugo Yuzu (he usado lima)
  2. 1/2 cucharadita pimienta recién molida negro
  3. 1/2 cucharadita puré de ajo
  4. 90 mililitros de aceite de semilla de uva (yo he usado de oliva)

Elaboración salsa de yuzu.
Bate todos los ingredientes juntos.

Elaboración
  1. Cocina los fideos en agua hirviendo durante aproximadamente 3 minutos, escurre y enjuaga con agua fría para eliminar el exceso de almidón. 
  2. Escurre y reserva.
  3. Fríe los puerros a 160 °C, hasta que estén crujientes. 
  4. Reserva.
  5. Corta las alcachofas tan delgadas como el papel. 
  6. Coloca en agua con perejil o limón para evitar la decoloración. 
  7. Seca las alcachofas apretando suavemente en una toalla. 
  8. Mezcla el aceite de oliva, el aceite de trufa, el jugo de yuzu, la pimienta molida, el Miso blanco seco y el queso parmesano. 
  9. Sazona con una pizca de sal al gusto. 
  10. Mezcla con la mitad de los puerros fritos.
  11. Mezcla los fideos en el aderezo Yuzu y cubre con la ensalada de alcachofas. 
  12. Adorna con los puerros restantes.



Fotografías @catypol - Circus day.

Bullabesa de espinacas

Sentarse cerca de la chimenea encendida, al lado de María, me hacía olvidarme de mi día a día, mis preguntas sobre como fue su juventud, como luchó por tantos hijos, lo que opinaba sobre eso y lo otro, me desconectaba de mis inquietudes. Siempre vi en ella un referente de lucha, ella decía porque no le quedaba otra, si hubiera podido elegir seguramente no estaríamos hablando ella y yo en ese momento.

No fui muy buena alumna suya, quizás sus ganas de lucha se me quedaron tan dentro que cuando deberían haber salido se quedaron en humo, aunque siempre he pensando en ella cuando he sacado la pancarta, las uñas y mi alma para seguir adelante.

Esa olla en el fuego, ese receta de fuera pero con sabores de dentro, era inconfundible cuando hablábamos juntas mientras cocinábamos. Un plato caliente, un vaso de vino y una compañía inmejorable que sabía hablarme del tiempo, de la fuerza y de la esperanza. 



Una receta del programa de tv de las recetas de Julie, en este caso me enamoró por lo sencillez y sabores suaves, es tradicional en Marsella y aunque es una ciudad pesquera, es en este caso la excepción, quizás por ser una receta antigua, quizás para variar en la gastronomía, quizás por ser así. 
En el vídeo de Julie usan badiana fresca e hinojo seco, yo no tenía así que usé semillas en un difusor. También nombra el pimiento de espelette pero en el vídeo no lo refleja así que no lo he añadido. También se cocina en una olla de barro que si no fuera por que en casa tenemos inducción también lo haría.
El resultado fue muy un guiso muy suave y muy rico. Acompañado de pan frito, aunque yo prefiero sin, es un guiso para tener en cuenta. ¡Verdad, verdadera!.

· BULLABESA DE ESPINACAS · 
(La bouillabaisse d'épinards de Jeannine)

Para 2

Ingredientes 
  • 2 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra
  • 1/2 cebolla
  • 1 diente de ajo
  • 1 puerro
  • 1 tomate rallado
  • 1 patata grande o 2 medianas, cortadas en rodajas de unos 0,5 cm. más o menos.
  • Azafrán
  • 500 mililitros de agua
  • 1/4 de cucharadita de semillas de hinojo (o hinojo seco)
  • 1/4 de cucharadita de semillas de anís estrellado ( o badiana)
  • Un trocito de piel de naranja seca
  • 1 hoja de laurel
  • Sal
  • 100 gramos de espinacas
  • 2 huevos 

Para acompañar:
Pan frito (puede ser con ajo fregado)

Elaboración
  1. Limpia y pica la cebolla, el puerro y el ajo. 
  2. En una olla/cacerola (si puede ser de barro mejor), verter el aceite y rehogar en él la cebolla, puerro y ajo. A fuego medio, que no se queme. 
  3. Seguidamente añade el tomate rallado, rehoga.
  4. Añade las patatas, removiendo para que se mezcle con el sofrito. 
  5. Del agua que tienes, aparta un vaso y en él diluye el azafrán.
  6. Añade este vaso de agua con azafrán a la olla, además del resto de agua. 
  7. Añade sal, la piel de la naranja, las semillas (en un difusor de infusiones) y deja cocinar durante 1/2 hora. 
  8. Corta las espinacas, en este caso yo usé espinacas baby, y agrégalas al guiso. 
  9. Remueve y tapa la olla. 
  10. Cocina 5 minutos más. 
  11. Parte los huevos de uno en uno y añádelos encima del guiso. 
  12. Tapa y deja cocinar hasta que la clara del huevo esté cocinada. 
  13. Apaga el fuego y sirve.

Relato y fotografías @catypol - Circus day.

Berenjenas rellenas

Estaban las tres Marías sentadas en el comedor, desayunando juntas, como cada mañana. Habían decidido vivir juntas desde que enviudaron. Compartían un apartamento en una residencia con todas las comodidades que se pueden tener a esa edad: médico, bingo, jardín y sala de baile. No se perdían ninguna de esas actividades, porque si no, no se enteraban de las últimas chismorrerías del lugar. Y aunque mayores —porque viejas no eran, según ellas—, aquel sitio daba para mucho.

Las tres se llamaban María: María Antonia, María José y María del Carmen. Siempre se reían pensando que, en su época, debía estar de moda la Virgen María, y que sus madres simplemente habían añadido el nombre del familiar que “tocaba” por compromiso. Entre ellas se llamaban MariAn, MariJo y Mamen, pero todos los demás las conocían como las tres Marías, porque lo hacían todo juntas.

Las tres habían estado casadas con marineros —preferían ese término a "pescadores", porque les sonaba más a "jet set"—, aunque la verdad era que estaban tan orgullosas de ellos que terminaban contando, entre risas, la vez que uno pescó un pulpo con un calcetín blanco.

Durante el primer año en la residencia, decidieron que el personal de cocina no estaba suficientemente cualificado para preparar pescado. Para disgusto de la directora, tomaron el mando. Se pusieron sus delantales de recuerdo de la Cofradía de Pescadores de San Pedro y empezaron a dar órdenes a diestro y siniestro sobre qué, cómo y cuándo hacer cada cosa.

Después de unas horas trajinando en la cocina, salieron al comedor por la puerta grande. Los residentes, de pie, las aplaudían. Ellas, más frescas que un pescado recién pescado, sonreían triunfantes. Mientras tanto, el jefe de cocina protestaba a la directora: —¡Si vuelven, yo me voy!.


   

En su larga vida seguro que las tres Marías han cocinado estas deliciosas berenjenas rellenas de pescado y marisco, y si no fue así ¡hagámoslo nosotros! . ¿El formato de presentación? es diferente si, para ese día especial. ¡Pruébalo!.

· BERENJENAS RELLENAS DE GAMBAS Y RAPE ·

Ingredientes para 4
  • 4 berenjenas medianas
  • 75 gramos de cebolla
  • 1/2 puerro
  • 160 gramos de rape (limpio, sin piel ni espinas)
  • 160 gramos de gambas 
  • Sal al gusto
  • Pimienta negra molida
  • 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
  • 4 cucharadas de salsa de tomate casera
  • 2 cucharadas de harina
  • 75 mililitros de caldo de pescado o leche

Mise en place
  1. Corta la cebolla en brunoise. 
  2. Lava el puerro, córtalo por la mitad y luego en láminas finas. 
  3. Corta el rape en dados pequeños. 
  4. Pela y desvena las gambas, pícalas en trozos. 
  5. Corta las berenjenas por la mitad longitudinalmente.

Cocción de las berenjenas
  1. Pon a hervir una olla con agua y sal. 
  2. Introduce las mitades de berenjena y cuece durante unos 20 minutos, hasta que estén tiernas pero firmes. 
  3. Retira, escurre y deja enfriar. 
  4. Vacia con cuidado la pulpa sin romper la piel. 
  5. Reserva las pieles para usar como moldes. 
  6. Trocea la pulpa.

Preparación del relleno
  1. En una sartén amplia, calienta el aceite de oliva. 
  2. Sofríe la cebolla hasta que esté transparente.
  3. Añade el puerro y cocina unos minutos más. 
  4. Incorpora la pulpa de berenjena y remueve. 
  5. Añade el rape y las gambas. 
  6. Cocina a fuego medio hasta que el marisco esté hecho. 
  7. Salpimienta al gusto. 
  8. Añade la salsa de tomate y mezcla bien. 
  9. Espolvorea la harina sobre el relleno, remueve bien y añade el caldo de pescado o la leche poco a poco. 
  10. Cocina hasta que espese, removiendo para evitar grumos. 
  11. Retira del fuego.

Montaje y horneado
  1. Pincela ligeramente con aceite moldes individuales tipo flanera. 
  2. Forra cada molde con la piel de berenjena, colocando la parte oscura hacia fuera. 
  3. Rellena con el preparado de marisco. 
  4. Hornea a 200 ºC (horno precalentado) durante 20 minutos.

Emplatado
  1. Sirve desmoldando las berenjenas rellenas sobre una base de salsa de tomate casera caliente.
Nota: El relleno que me sobró (poco) lo refrigeré y a los dos días lo usé con unos tartaletas pequeñas para canapés. 



Si prefieres también puedes hacer la versión clásica, colocando una gamba encima cuando horneas como decoración. If you prefer, you can also make the classic version, placing a shrimp on top when baking as a decoration.


Relato, fotos y vídeo @catypol - Circus day.

Poke

A él le gustaba pintar, pintaba el mar embravecido con un pequeño barquito que daba tumbos pero no se hundía. Pintaba pájaros volando sobre montañas que habían crecido de la tierra lo suficiente para ser inalcanzables. Pintaba el coral hundido en el mar que daba cobijo a tantos peces de colores. Pero también la pintaba a ella.

Ella, su diosa de piel morena y pelo largo, la recordaba tan bella cuando bajó del avión y se acercó para ponerle el collar de flores en su cuello y lo saludó con su Aloha lleno de bendiciones tan típico de la tierra. 

Ella que por la noche le bailaba el hula y se movía como ese barquito en el mar embravecido, ella que le mostró la gastronomía de la isla e hizo de musa de sus lienzos, con sus verdes ojos y su pelo negro, la que lo amó en luna llena bajo el volcán y lo olvidó a pleno sol.



¿Es el plato de moda?, es una delicia de ensalada de pescado crudo, normalmente suele ser atún pero también las hay de salmón o pulpo (tako poke). Se sirve como aperitivo en Hawaii y también triunfa en Instagram, así que es tendencia que ha llegado a Europa. Adáptalo a tu gusto, yo lo hice con arroz para sushi pero me consta que puede hacerse con otros arroces como integral, Basmati, Thai...


· POKE SUSHI DE ATÚN ·

Ingredientes
  • 3 cucharadas de salsa de soja
  • 3 cucharadas de aceite de sésamo
  • 2 cucharadas de vinagre de arroz
  • Cebollino, picado
  • 1 lomo de atún de unos 350 gramos
  • Arroz para sushi
  • Zanahoria
  • Rabanitos
  • Aguacate
  • Semillas de sésamo
  • Trocitos de alga nori

Salsa poke
  • 2 cucharadas de soja
  • 1 cucharadita de azúcar
  • 1 cucharada de chili
  • 2 cucharadas de aceite de sésamo

Elaboración
  1. Mezcla la salsa de soja, el aceite de sésamo, el vinagre de arroz y el cebollino picado. 
  2. Corta el lomo de atún a dados y agrégalo a la mezcla anterior. 
  3. Tapa y dejar macera 24 horas.
  4. Prepara el arroz para sushi (me guié de esta elaboración), deja enfriar. 
  5. Corta el aguacate en tiras. 
  6. Pela y cortar la zanahoria en rodajas finas para formar una flor, pero también se puede cortar en palitos. 
  7. Limpia bien y corta en rodajas los rabanitos para formar un flor, pero también se puede cortar en palitos.
  8. Mezcla todos los ingredientes de la salsa poke. Caliéntalos un poco para que se derrita el azúcar y deja enfriar.
  9. Pon en dos cuencos el arroz, el atún macerado (sin el líquido), la zanahoria, los rabanitos, el aguacate, trocitos de alga nori y las semillas de sésamo sobre el aguacate. 
  10. Añade una cucharada de la salsa al poke.
Nota: Cambia el atún por salmón si te gusta más. Este atún ya había estado congelado y descongelado por lo que no tuve que hacerlo yo. 


Relato y fotografías @catypol - Circus day.

Salchichas caseras

Don Eustaquio, un jubilado con más historias que dientes, vivía en una casita al lado de la fábrica de limonada. Su mayor tesoro era una radio antigua que solo sintonizaba rancheras y concursos de cocina de los años 70. Un día, mientras preparaba su famosa salchicha casera, la radio empezó a emitir un mensaje extraño:

"¡Atención! ¡Primer premio del concurso 'Canta y Cocina' es un viaje a las Bahamas en bañador retro!"

Eustaquio, que no sabía cantar pero sí gritar con estilo, agarró su salchicha recién cocida, se puso un bañador floreado de cuando era cabo, y salió montado en su viejo caballo Claudio, que ya solo caminaba si le prometías zanahorias o le ponías a Luis Miguel.

__¡A la fábrica de limonada, Claudio! ¡Ahí están grabando el concurso!

Claudio se tomó su tiempo. Al llegar, se colaron por la puerta trasera justo cuando un presentador gritaba:

__¡Último participante!

Don Eustaquio, ni corto ni perezoso, subió al escenario, alzó la salchicha como si fuera un micrófono y entonó algo entre un bolero y un ataque de tos. La gente estalló en aplausos y carcajadas. Claudio, emocionado, relinchó. Ganaron. A día de hoy, la foto de Don Eustaquio en bañador, a lomos de Claudio y levantando la salchicha como un trofeo olímpico, aún cuelga en la fábrica. 




La ventaja de hacer las salchichas en casa es que tu controlas los ingredientes, y aunque no lo parezca son muy fáciles de hacer, podemos poner las verduras que más nos gusten, imagina una salchicha con guisantes o con habitas, estás están hechas con acelgas, las acelgas tienen un ligero sabor terroso que combina muy bien con la carne, no se nota en el resultado final y sabes lo que estás comiendo.


Cuando la asociación española de fabricantes de vegetales congelados se puso en contacto conmigo para colaborar en la II edición de #MiVerduraCongelada haciéndome hincapié en la importancia de hacer recetas elaboradas para niños me encantó.

· SALCHICHAS DE POLLO CON ACELGAS ·

Para 2 salchichas

Ingredientes
  • 150 gramos de carne picada de pollo
  • 100 gramos de acelga congelada
  • 1 cucharadita de pimentón dulce
  • 1 cucharadita de ajo y perejil (seco)
  • Sal y pimienta negra molida
  • Film transparente de cocina
  • Pan de barra o pan de hot dog
  • Salsa de tomate casera

Elaboración
  1. Pon la acelga en el microondas, función descongelar, durante unos minutos. 
  2. Aprieta bien la acelga para que salga toda el agua que tiene. 
  3. Mezcla, en un cuenco, la carne, la acelga cortada a trocitos, el pimentón y el ajo con perejil. 
  4. Salpimienta.
  5. En un trozo de film po parte de la mezcla, y ayudándote con el film forma una salchicha. 
  6. Ata con un nudo en los dos lados. 
  7. Pon las salchichas al vapor, durante 25 minutos. 
  8. Con cuidado, que quema y mucho, saca las salchichas de la vaporera y quita el film. 
  9. En una sartén con un poco de aceite de oliva marca las salchichas para que quede un poco dorada.
  10. Sirve con pan de barra o con pan de hot dog. 

Para acompañar de salsa de tomate casera. ¿Ketchup y mayonesa? pues también.




¡La II edición de #MiVerduraCongelada ya está en marcha!. Para la Asociación Española de Fabricantes de Vegetales Congelados (ASEVEC), el objeto de #MiVerduraCongelada es concienciar a la población de la importancia de introducir verduras en la dieta diaria, y este año, con especial atención a los más pequeños. 

Creemos que es fundamental sensibilizar a las familias sobre la importancia de enseñar, desde la infancia, a adquirir hábitos saludables. Así, entre todos, aportamos nuestro granito de arena para reducir los alarmantes índices de sobrepeso y obesidad infantil existentes hoy en día.

¿Por qué verduras congeladas y cuáles son sus ventajas?
- Llegan a la mesa prácticamente en las mismas condiciones y con la misma calidad con las que son recogidas en la huerta.
- El proceso de ultracongelación minimiza las posibilidades de contaminación de los alimentos; evitando comprometer la salud de las personas.
- Se pueden consumir todo el año.

Asociación Española de Fabricantes de Vegetales Congelados (Asevec) 


Relato, receta y fotografías @catypol - Circus day.

Recetas con coliflor

Cuando todos ya dormían, corría escaleras arriba para tumbarme en el suelo del altillo, justo debajo de la claraboya redonda que el dueño original de la casa había hecho instalar para poder colocar allí su telescopio en invierno, cuando hacía tanto frío que, incluso, del cristal del aparato salían pequeñas nubes heladas.

No sé de constelaciones ni de otros mundos alineados con el mío. No sé quién vive en la Luna ni si en Marte hay marcianos o huertos de coliflor. Yo solo quiero un poco de paz, contar las estrellas como se cuentan las ovejas para dormir, pensar un deseo al paso de una estrella fugaz y dejarme envolver por la luz de la Luna cuando está llena.

Mis hermanos se ríen de mí cuando les cuento que visito el espacio sin cohete, o que su ruido es igual al del paso de meteoritos —aunque en el espacio no haya ruido—, y que en los anillos de Saturno suenan canciones para niños que puedes escuchar si cierras los ojos y abres la imaginación. Todos piensan que, si pudiera, sería astronauta.

Y no, yo no quiero ser astronauta. Me da miedo el silencio y el espacio infinito; temo que el cordón que me una a la nave se rompa y me deje vagando sin rumbo. A mí lo que me gusta es sacar la magia de donde sea, saber que si miro hacia arriba encontraré que el cielo sigue estando allí; que las respuestas las encuentro si las busco, y si no las busco, también. Que de la casualidad nacen grandes historias, recetas o sentimientos. Y que no le pongo fin a mi imaginación, porque la siento muy dentro, tan viva y tan clara como cuando miro el firmamento a través de la claraboya y veo todo un mundo de color.



Entramos en una semana especial para los papás, aunque la fiesta se ha vuelto muy comercial aún recuerdo la manualidad que hacíamos en el cole para regalarla a nuestro padre, no se compraba nada. Y la verdad, no hace falta comprarle nada, hijos cocinen algo para festejarlo, algo sano para variar, un abrazo o un te quiero si hace mucho que no lo haces, verás a tu papá feliz y no discutas al menos ese día. 

Aquí te dejo 2 recetas super fáciles.

· MIGAS DE COLIRROZ ·

Para 2

Ingredientes
  • Aceite de oliva 
  • 2 ajos picados
  • 75 gramos de panceta, cortada en trocitos pequeños
  • 1 cucharada de pimentón dulce o ahumado
  • 200 gramos de colirroz (coliflor picada)
  • Sal
  • 2 huevos fritos (para acompañar)

Elaboración
  1. Sofríe en aceite de oliva los ajos picados, a fuego bajo, añadir la panceta. 
  2. Añade el pimentón, remover. 
  3. Añade la colirroz, remover. 
  4. Añade la sal. 
  5. Remueve y deja cocinar 3 minutos. 
  6. Sirve.
  7. En una sartén aparte fríe 2 huevos. 
  8. Acompaña las migas con los huevos fritos.





Estaba en pleno atasco y mi paciencia cada vez iba a menos. Siempre me pregunté cómo lo hacía mi mujer sin explotar cada vez que se encontraba en esta situación. La compra, recoger al pequeño, llamar y recordar a los mayores que debían estar en casa después de clase, intentar cambiar de ruta para no encontrarme siempre con el mismo atasco de las cinco… ¡uff! Debí aprender más de ella.

La adolescencia no es fácil, ni para ellos ni para mí. Recuerdo vagamente la mía y ahora quizás me vendría bien. Cada vez que le pregunto a mi padre sobre el tema, suspira y sonríe para terminar diciéndome: —Hijo mío, esa parte de tu vida mejor no recordarla —y eso me asusta, y mucho.

La rebeldía de los mayores hace que el pequeño me vea muchas veces irritado, y lo lamento. Él es todavía el que me abraza y me dice lo mucho que me quiere; el que me despierta por la mañana a besos, o el que me canta a pleno pulmón “Chuchuwa” mientras conducimos al cole. Adoro esas manifestaciones de amor en estos tiempos revueltos.

Eso no me gusta...estoy a dieta...ahora soy vegetariano...¡por favor! eso ya no se lleva... necesito unas zapatillas nuevas...¡otra vez coliflor para comer!...me han invitado a una fiesta que terminará tarde, me dejarás ir ¿verdad?...me viene a recoger mi novio... ¿queeé? es como vivir en el país de la maravillas en la que ellos se han tomado la pócima para crecer y yo voy corriendo de un lado a otro como el conejo blanco ¡no hay tiempo! ¡no hay tiempo!.


· HUMMUS DE COLIFLOR ·

Ingredientes para 4
  • 320 gramos de coliflor en floretes
  • 2 cucharadas de aceite de oliva 
  • 2 cucharadas de tahini
  • 2 cucharada de zumo de limón
  • 2 diente de ajo
  • 2 cucharadita de comino molido
  • Sal y pimienta al gusto
Decoración:
  • Semillas de girasol, calabaza y/o sésamo negro
  • Aceite de oliva virgen extra
Elaboración
  1. Hierve los floretes de la coliflor. 
  2. En un vaso de túrmix, bate la coliflor con los demás ingredientes. 
  3. Salpimienta al gusto. 
  4. Sirve y decora con las semillas y un poco de aceite de oliva virgen extra.




Relato, fotos y vídeo @catypol - Circus day

Mole verde

[RETO COOKING THE CHEF]
Sin investigación no hay cocina, en el sentido que si creas de la nada acabas creando nada, entonces nosotros creemos que nuestra cocina es básicamente un seguimiento sobre la tradición, y de ahí es de donde partimos, sin conocer nuestras raíces es muy difícil crear.

El círculo. Ni principio ni fin.
"La madre tierra es circular. La tortilla es circular. La ciudad es circular. El calendario maya es circular. Y emplato en círculo". Su logo es un círculo que contiene su nombre. Movámonos en círculo y regresemos al inicio. El plato que mejor encaja en la teoría del círculo es Madre Mole. El nombre impacta porque a una madre no se la nombra de forma gratuita. Si sacas a jugar a una madre, que sea en serio, de forma respetuosa. El mole es un icono. Pocos platos más intrincados y profundos: México cabe dentro. Salsa espesa con decenas de ingredientes, que cooperan, que se complementan, que se entrelazan hasta conformar un sabor nuevo. El mole es uno y cien.

De niño, en la escuela, a Enrique lo llamaban Pozole: "Me gustaba el pozole, la sopa con oreja, trompa, buche de cerdo y maíz. Lo de Pozole fue deteriorando, pasó a Pozol, a Puchol y de ahí a Pujol. Al principio algunos pensaban que era un restaurante catalán, lo que creo confusión". ¿Por qué no catalán? El abuelo paterno, Enrique, lo era.

"Naces cocinero y ya te chingaste", expresa Enrique con esos ojos de chino que le diluyen la sonrisa. Los padres, Alfonso y Pilar, quisieron que estudiara alguna profesión con prestigio, aunque cuando a los 12 años el chavo calentó una sopa de Campbell's para darles la bienvenida tras un viaje, supieron que el fuego sería el ganador. Enrique Olvera para el Periódico.




Señoras y señores estamos a día 5 y este mes toca presentar al gran chef Mexicano Enrique Olvera y con ello participo en el reto Cooking The Chef, bienvenidos al show.

Los moles son sinónimos de estacionalidad. Como muchas referencias tradicionales, conjugan, a la perfección, el "aquí y el ahora" que a tantos chefs nos interesa reflejar en nuestras cocinas. Enrique Olvera, México de adentro hacía afuera.

· MOLE VERDE ·

Para 4

Espárragos y habas tiernas.
8 espárragos verdes, con las puntas separadas de los tallos
1 cucharadita de sal 
100 gramos de haba tierna y limpia

Mole de brócoli.
1/2 cebolla blanca cortada en trozos grandes
1 diente de ajo grande
60 ml. aceite de oliva
200 gramos de brócoli cortado en trozos grandes
80 gramos de los tallos de espárragos reservados, troceados
1 chile jalapeño
35 gramos de pepita de calabaza
240 ml. agua
20 gramos de cilantro
1 cucharadita de sal

Col china.
1 cucharada de cebolla blanca fileteada
1 cucharadita de aceite de oliva
8 hojas de col china cortadas en chiffonade
3 cucharadas de agua
1 cucharadita de sal

Alcachofa.
2 alcachofas tiernas
120 ml. de vinagre blanco 
2 cucharadas de zumo de limón
240 ml. de aceite de oliva
1 cucharadita de sal

Puré de espinacas.
1 cucharadita de bicarbonato de sodio
1 cucharadita de sal
80 gramos de espinaca tierna

Puré de nabo.
1 1/2 piezas de nabo pelado
240 ml. de nata para cocinar
1 cucharadita de sal

Coliflor.
100 gramos de coliflor blanca en un solo florete cortado en pluma y 4 láminas
1 cucharada de zumo de lima
1 cucharadita de sal 


Espárragos y habas tiernas.
  1. Lleva a ebullición 1 litro de agua con sal. 
  2. Cuece las puntas de espárrago y las habas durante 5 minutos. 
  3. Escurre, enfría y pela las habas.

Mole de brócoli.
  1. En una cacerola, pocha a fuego medio la cebolla y el ajo. 
  2. Añade el brócoli, después los tallos de espárragos y finalmente el chile. 
  3. Echa las pepitas de calabaza y el agua, lleva a ebullición. 
  4. Retira del fuego e incorpora el cilantro. 
  5. Tritura, pasa por un colador fino y pon a fuego medio hasta que hierva. 
  6. Retira del fuego y rectifica la sazón.

Col china.
  1. En una sartén a fuego medio, saltea la cebolla en el aceite. 
  2. Agrega la col y el agua.
  3. Tapa y cuece a fuego bajo durante 3 minutos. 
  4. Sazona y reserva.

Alcachofa.
  1. Pon 1 litro de agua con el zumo de limón y el vinagre, sumerge las alcachofas durante 15 minutos. 
  2. Escurre y corta en octavos. 
  3. Calienta una olla con el aceite y la sal a 65 ºC y cocina las alcachofas 25 minutos manteniendo la temperatura constante. 
  4. Reserva.

Puré de espinacas.
  1. En una olla a fuego alto, lleva a ebullición 1 litro de agua con el bicarbonato y la sal. 
  2. Blanquea las espinacas durante 30 segundos. 
  3. Escurre, enfría, tritura y pasa por un colador fino. 
  4. Rectifica la sazón y pon el puré en una manga o botella dispensadora.

Puré de nabo.
  1. Pica el nabo finamente y cocina en una olla con la crema y la sal a fuego medio hasta que suavice. 
  2. Tritura y pasa por un colador fino. 
  3. Coloca en una maga o botella dispensadora.

Coliflor.
  1. Sazona la coliflor con el zumo de lima y la sal. 
  2. Separa en pequeños floretes y hornea a 180 ºC durante 20 minutos, hasta que se dore.

Montaje.
  1. En cada plato, extiende 90 gramos de mole en forma de círculo con ayuda del dorso de una cuchara. 
  2. Dispone encima la col, las habas, los espárragos y las alcachofas. 
  3. Pon 3 bombones de ambos purés y termina con una lámina de coliflor. 

Notas: 
Él usa sal de Colima para la alcachofa y el puré de espinacas para lo demás sal fina. 
En vez de nabo usa colinabo pero no encontré en la verdulería. 
También usa chile serrano en lugar de jalapeño pero el único que encontré natural era el jalapeño y de bote. 




Fotografías @catypol - Circus day.

Mejillones el Bulli

[RETO COOKING THE CHEF]
"La gente piensa que soy extravagante, pero soy una persona normal", dice. "Estoy casado y sin hijos. Mi esposa es maravillosa, maravillosa. No separo mi trabajo de mi vida. Todo es uno. Pero hay aspectos de mi vida personal que no son públicos. Nunca he tomado una foto en mi casa para una publicación, voy al cine, al teatro, leo el periódico: soy normal siempre decimos que la gente que trabajó en el Bulli eran personas comunes que hicieron cosas extraordinarias". Ferrán Adrià para Epicorius.

Había una vez, el lenguaje gastronómico era francés. Si un chef quería subir los precios en su menú, todo lo que tenía que hacer era añadir un toque de "jus", un toque de "vin", tal vez un poco "petit". palabras en francés que forjaron una conexión entre lo que el chef estaba sirviendo y el hogar de "gastronomía": usted podría estar comiendo pescado y patatas fritas en un pub de Croydon, lo llaman "poisson-frites" y de repente estás en una brasserie de París , mirando profundamente en los ojos de un aspirante a actriz de teatro mientras se recita con ternura Rimbaud.

A continuación, Ferran Adrià llegó, y la jerga gastronómica dio un giro tecnocrático. Palabras como "deconstruir" y "esferificación" aparecieron en los menús. Adrià se llama a sí mismo un chef de "vanguardia", un "constructivista culinario" y un "modernista". Los alimentos dejaron de sonar poéticos y adquirieron una teoría más académica: en 10 años se pasó de Rimbaud a Roland Barthes, de ménage à trois a "pastinaca tres maneras". Alex Dymoke en City A.M. sobre Ferrán Adrià




Creo que has adivinado que estamos a día 5 y con esta receta participo en el reto Cooking The Chef . Este mes está dedicado a Ferrán Adrià, y yo no tengo mucho más que decir, para mi es un genio, un creativo gastronómico.

Por cierto; mi receta de pollo con cebolla (receta familiar) está incluida en el libreto que acompaña el libro de Ferrán Adrià: La comida de la familia. #menú4. Fue elegida entre muchas y forma parte de las únicas 15 recetas que componen este libreto 😍


Tapas fría - 1994 - Receta 239 

· MEJILLONES CON ESPUMA DE CILANTRO ·

Para 4

Para abrir los mejillones
4 mejillones (de roca) de 30 g/u.

Para los mejillones gelatinados
4 mejillones de roca (elaboración anterior) 
50 g de agua de mejillón (elaboración anterior)
1/4 de hoja de gelatina de 2 g (previamente rehidratada en agua fría)

Para el agua de cilantro 
150 g de cilantro fresco 
100 g de agua

Para la espuma de cilantro 
100 g de agua de cilantro (elaboración anterior)
1⁄4 de hoja de gelatina de 2 g (previamente rehidratada en agua fría)
1 sifón ISI de 1⁄2 l 
1 carga de N2O
sal

Para la juliana de naranja 
1 naranja

Otros 
sal gorda 


Mejillones.
  1. Sumerge en agua hirviendo los mejillones durante 10 segundos.
  2. Con la ayuda de una puntilla corta los pedúnculos que unen los mejillones con las valvas. 
  3. Saca los moluscos y huélelos uno a uno.
  4. Guárdalos en su propia agua pasada por una estameña.
  5. Guarda las valvas.

Mejillones gelatinados.
  1. Coloca los mejillones en una rejilla con una separación entre ellos de 1 cm. 
  2. Guarda en la nevera.
  3. Calienta 1/4 parte del agua del mejillón y disuelve la gelatina. 
  4. Retira del fuego y mezcla con el resto del agua de mejillón.
  5. Guarda la mitad del agua de mejillón en la nevera y ve removiéndola de vez en cuando hasta que adquiera densidad espesa.
  6. Napa cada mejillón con la gelatina comprobando la densidad, puesto que si está muy líquida no se adhiere al molusco y si está demasiado cuajada no lo cubrirá uniformemente.
  7. Guarda el mejillón en la nevera para que la gelatina se solidifique.
  8. Repite los puntos 4 y 5 dos veces más.

Agua de cilantro.
  1. Separa las hojas de los tallos. 
  2. Necesitas 100 gramos de hojas de cilantro.
  3. Escalda las hojas en agua hirviendo, durante 5 segundos.
  4. Refresca en agua y hielo y escurre.
  5. Tritura con 100 gramos de agua. 
  6. Cuela y pasa por una estameña.

Espuma de cilantro.
  1. Calienta 1/4 parte del agua de cilantro y disuelve la gelatina.
  2. Retira del fuego y mezcla con el resto del agua. 
  3. Pom punto de sal.
  4. Cuela y llena el sifón con la ayuda de un embudo.
  5. Carga el sifón y deja reposar 2 horas en la nevera.

Juliana de naranja.
  1. Pela la naranja y procura dejar el mínimo de parte blanca del interior de la piel.
  2. Haz una juliana de piel de naranja de 0,1 cm de grosor y de 3 cm de longitud.

Acabado y presentación.
Extiende en cuatro platos una capa de sal gorda. 
Deja las 8 valvas de los mejillones limpias de pedúnculos y disponlas encima de los platos con sal gorda.
Pon un mejillón, con la cara gelatinada hacia arriba, en una de las dos valvas de cada plato.
Llena la otra valva de cada plato con espuma de cilantro.
Acaba con tres tiras de juliana de naranja encima de la espuma de cilantro.



Fotografías @catypol - Circus day.

Canelones de gambas

En una cala escondida de la costa, donde la brisa marina olía a sal y a vino joven, se encontraba el pequeño pueblo de Sant Camil. Allí vivía Rosita, una señorona divertida, de voz ronca por los años y las carcajadas, que había decidido en su jubilación hacer lo que siempre quiso: abrir la primera bodega submarina del pueblo.

Si los vinos envejecen mejor bajo el mar… ¡pues yo también! —decía, hundiendo botellas y preocupaciones entre las rocas sumergidas.

Pero no todos compartían su entusiasmo. Un grupo de jubilados que se hacían llamar "La Cofradía del Bingo", empezaron a quejarse de que el vino submarino “molestaba a los peces” y que Rosita “quería hundir el pueblo como un Titanic de segunda”.

Rosita, lejos de amilanarse, organizó una comida al aire libre para calmar los ánimos. Preparó canelones de gambas y colocó la mesa bajo el árbol de la vida, un viejo olivo retorcido que, según la leyenda, crecía justo en el centro energético del pueblo.

Los jubilados llegaron con ceños fruncidos. Pero tras el primer bocado y una copa de tinto submarino, las quejas se diluyeron.

Este vino está raro… pero me gusta —admitió Manolo, el más cascarrabias.

Es como si el mar te diera un abrazo —dijo otra, con los ojos brillantes.

Rosita sonrió, orgullosa. Cuando el sol empezó a caer y la brisa se volvió más fresca, alguien sacó un acordeón. Bailaron, rieron y despejaron dudas.





· CANELONES DE GAMBAS ·

Ingredientes 
12 láminas de pasta para canelones
4 huevos 
1/2 piña
20 gambas cocidas 

Salsa rosa
150 gramos de mayonesa
3 cucharadas de ketchup
1/2 cucharada de vinagre
1/2 cucharada de brandy 
1/2 cucharada de zumo de limón
1/2 cucharada de mostaza
Sal

Mise en place.
  1. Hierve las láminas de pasta. 
  2. Deja enfriar. 
  3. Cuece los huevos durante 10 minutos y enfríalos con agua y hielo.
  4. Pélalos y abre dos huevos, reserva sus yemas. 
  5. Trocea la piña, los huevos y las gambas cocidas. 
  6. Reserva.

La salsa. 
  1. Mezcla la mayonesa con los demás ingredientes y prueba de sal.

Montaje.
  1. Mezcla la salsa con la piña, el cangrejo y los huevos. 
  2. Prueba de sal. 
  3. Extiende las láminas de pasta y rellénalas. 
  4. Forma los canelones. 
  5. Pica las yemas de huevo apartadas. 
  6. Pincela los canelones con salsa rosa y sobre ella espolvorea con yema de huevo. 


Relato, receta y fotografías @catypol - Circus day

Moqueca

[RETO COOKING THE CHEF]
Apenas llevaban tres años en Brasil y su restaurante ya estaba considerado como uno de los mejores extranjeros del país. Los llamados "gemelos de oro" de la cocina española inauguraron Eñe en 2007 en la cosmopolita Sao Paulo, haciendo lo propio en 2009 en Río de Janeiro, y formando una marca que ha abanderado el desembarco nacional en Brasil.

Son gemelos idénticos pero si quieres saber cómo diferenciar a los hermanos Torres, háblales. El que se extienda más en las respuestas, el que más hable, será Javier. El que sea más conciso y vaya directo al grano será Sergio. Y es que si bien estos dos cocineros que han conseguido la simpatía del público a través de su espontaneidad en la tele

Los gemelos Torres descubrieron la pasión por la gastronomía a través de su abuela Catalina, quien desde un pequeño piso en el barcelonés barrio de Gracia cocinaba para las familias burguesas de la ciudad. Ella les enseñó los mercados y el amor por la cocina. Con 14 años entraron en una escuela de hostelería, después trabajaron con sus ídolos en los mejores restaurantes de Europa.




Esta vez el reto Cooking The Chef nos ha llevado a cocinar recetas de los hermanos gemelos Torres, dos simpatiquísimos cocineros españoles que cocinan en su restaurante Dos cielos entre el cielo y la tierra. Quizás te preguntes por qué de todas sus recetas he elegido la moqueca, plato de Brasil y con un ingrediente difícil de encontrar aquí. Pues bien, viendo las recetas que nos enseñan en su programa Torres en la cocina, el 5 de diciembre del año pasado ellos nos cocinaron junto a la mujer de Sergio, Mariana una moqueca de camarón. 

Mi dificultad o no tanta, es que este plato usa aceite de dendé que es aceite de palma, ingrediente muy típico en Brasil pero aquí de difícil acceso. Después de "investigar" vi que podía sustituirse por un aceite suave, por eso yo he usado aceite de oliva suave pues como leí en la red, lo importante es el sabor de la leche de coco. A mi me gustó mucho el resultado, con un suave sabor a coco y pimiento, no le puse el toque de picante que ellos dan al final pero si te gusta puedes usarlo.


· MOQUECA ·

Ingredientes para 4 personas
  • 1 kilo gamba blanca
  • 2 pimientos rojos
  • 2 pimientos verdes
  • 1 cebolla tierna
  • 4 dientes de ajo
  • Sal y pimienta
  • 100 ml. leche de coco
  • Cilantro
  • Aceite de oliva suave
Arroz basmati, para acompañar

El arroz.
  1. 2 tazas de arroz basmati: Limpia el arroz con agua hasta que transparente. 
  2. Pon en una cacerola las 2 tazas de arroz por 4 tazas de agua y cocina hasta que el agua queda absorbida por el arroz. 
  3. No hace falta remover. 

Moqueca. 
  1. Limpia la gamba, desvena. 
  2. Corta en brunoise los pimientos y la cebolla. 
  3. Pica el ajo. 
  4. Calienta en una cacerola el aceite de oliva, rehoga los pimientos, la cebolla y el ajo. 
  5. Añade las gambas y remueve. 
  6. Salpimienta. 
  7. Añadela leche de coco y deja cocinar unos 5 minutos. 
  8. Mientras pica un poco de cilantro.
  9. Sirve la moqueca espolvoreando cilantro por encima y acompáñala con arroz basmati hervido.




Fotografías @catypol - Circus day.

Hamburguesa "Emilia"

[RETO COOKING THE CHEF]
Él es un genio, pero en casa cocino yo._ dice Lara Gilmore esposa de Massimo Bottura. El apoyo de ella ha sido decisivo, pues es la única persona capaz de descifrar los conceptos abstractos que luego su marido transforma en ideas comestibles. Pero lo que sin duda significa una aportación trascendente de ella a la cocina de Massimo, es su inquietud cultural, pues lo obliga a salir y visitar exposiciones de arte, lo que le ha permitido ampliar sus horizontes mentales y proponer platos cada vez más bellos y sazonados con una estética del sabor muy pleno.

Nacida en Brooklyn, Estados Unidos, ella creció rodeada de arte y lo que comenzó como una afición heredada con los años se convirtió en una pasión. Para costear su pasión decidió tomar un segundo empleo: Caffe di Nonna, un restaurante italiano en Nueva York que recién abría sus puertas, buscaba personal. Al saber italiano y estar familiarizada con la cultura de aquel país, obtuvo fácilmente un empleo como camarera, ahí conoció al chef del lugar, Massimo Bottura.

Para saber cuán grande es un artista debemos primero saber de su mujer, y creo que ella es ese 50% que hace que él sea 100% mejor.



Este mes Cooking the chef tiene el honor de presentarnos al chef italiano Massimo Bottura, del que para muchos es un genio y para otros un loco, o quizás todo unido haga su descripción más simple, sea como sea, él estudia y trabaja cada plato que presenta a sus clientes, nada es de la casualidad. Y con esta receta participo en el reto. 

A mi me ha costado mucho decidirme por alguno de sus platos, son obras de arte, por lo que cuando encontré esta receta tan mezcla de Italia y Norteamérica, como su familia, por ella me decidí. Vas a pensar, bah! una hamburguesa más, y te equivocarás, la mezcla de ingredientes está muy bien pensada, y si alguna vez te decides a probarla verás que tengo razón. Bottura la llama Emilia por ser su región de nacimiento (Emilia-Romaña), y usa los ingredientes propios de allí, el parmesano y el vinagre balsámico de Modena.

· HAMBURGUESA "EMILIA" ·
 
Ingredientes (para 4 hamburguesas)
  • 250 gramos de Parmigiano-Reggiano rallado
  • 800 gramos de de carne picada de ternera
  • Sal y pimienta negra, recién molida
  • 4 cucharadas de mayonesa
  • ¾ cucharada de vinagre balsámico
  • 2 cucharadas de agua
  • 1 rebanada de pan blanco crujiente, del día anterior
  • 6 cucharadas de aceite de oliva
  • 1 puñado de hojas de perejil
  • 1 cucharada de alcaparras, enjuagadas y secadas
  • 3 filetes de anchoa
  • ½ cucharadita de vinagre de vino blanco
  • ¼ diente de ajo
  • 4 panes de hamburguesa
Hamburguesas.
  1. En un cuenco grande, mezcla el queso con la carne. 
  2. Sazona con sal y pimienta. 
  3. Divide la mezcla en 4 porciones iguales y forma las hamburguesas. 
Para la mayonesa/balsámico.
  1. En un cuenco pequeño, mezcla la mayonesa y el balsámico. 
Para la salsa verde. 
  1. Vierte el agua sobre el pan y deja que se absorba por completo. 
  2. En una licuadora o procesador de alimentos, pon el pan remojado pero sin agua, 5 cucharadas de aceite, perejil, alcaparras, anchoas, vinagre de vino blanco, ajo y sal.

Terminar.
  1. Calienta el aceite restante en una sartén grande a fuego medio-alto. 
  2. Una vez caliente, añade las hamburguesas a la sartén y cocina hasta que esté bien sellado, 2-3 minutos por cada lado. 
  3. Para servir, extiende la base de cada pan con la mayonesa/balsámico.
  4. Cubre con la hamburguesa. 
  5. Vierte la salsa sobre la hamburguesa.
  6. Cubre con la otra mitad del pan.



Fotografías @catypol - Circus day.

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