María era especial, pequeña, un poco arrugada y con mucho nervio. ¡Soy vieja!__ me decía cuando hablábamos juntas. Nunca quise preguntarle la edad, pero cuando yo era pequeña ya era así. La veía moverse en la cocina igual que un bailarín en la pista. ¡Pero niña qué cosas me dices!__ me decía medio avergonzada y muerta de la risa.
No importa la edad que yo tuviera, siempre me llamaba niña y me pellizcaba la mejilla, ¡tan bonita ella!. Si tenía mal de amores me preparaba chocolate y me contaba la vez que un pretendiente le regalaba cada día una flor, y un día dejó de hacerlo, no pasó nada siguió adelante. Si me dolía la barriga, su arroz hervido y sus historias, casi sacadas de las rondaies, con princesas, príncipes y ogros hacían que no lo sintiera. Tenía remedios para el cuerpo y alma y nos cocinaba recetas que ella decía eran antiguas y casi olvidadas pero que recordaba con total exactitud.
No importa la edad que yo tuviera, siempre me llamaba niña y me pellizcaba la mejilla, ¡tan bonita ella!. Si tenía mal de amores me preparaba chocolate y me contaba la vez que un pretendiente le regalaba cada día una flor, y un día dejó de hacerlo, no pasó nada siguió adelante. Si me dolía la barriga, su arroz hervido y sus historias, casi sacadas de las rondaies, con princesas, príncipes y ogros hacían que no lo sintiera. Tenía remedios para el cuerpo y alma y nos cocinaba recetas que ella decía eran antiguas y casi olvidadas pero que recordaba con total exactitud.
Cocina mallorquina siglos XVIII · XIX. Volver a la cocina antigua y aunque ahora use artilugios antes jamás pensados y los ingredientes encontré en tiendas o mercados y no en el corral de casa, mi intención es enseñarte lo que se cocinaba en una Mallorca antigua. Esta es mi interpretación de esta receta, espero que te guste, para los mallorquines que la desconocen y quieran regresar al pasado y para los demás que quizás entre ella vean similitud con la suya. En esta entrada nos trasladamos a la cocina del año 1876, siéntate a la mesa y disfruta del espectáculo.
· CANEFES DE 1876 ·
Ingredientes
Albóndigas
- 100 gramos de carne picada mixta de cerdo y ternera
- 50 gramos de tocino
- 1 huevo grande
- 30 gramos de miga de pan
- 3 cucharadas de caldo para remojar el pan
- Pimienta negra y sal al gusto
- 15 gramos de harina, solo si lo necesita
Canefes
- 6 albóndigas
- 6 tiras de tocino finas
Salsa
- 2 cucharadas soperas de aceite de oliva
- 200 gramos de tomate triturado
- 50 gramos de cebolla
- 100 mililitros de caldo
- Pimienta negra al gusto
- Sal al gusto
Precalentamos el horno a 200ºC.
Las albóndigas. Picar el tocino y mezclar con la carne picada, el huevo, la miga de pan remojada en el caldo, sal y un poco de pimienta negra molida. Si la masa quedará un poco líquida se añadirá la harina.
Las canefes. Formar 6 albóndigas y envolverlas con las 6 tiras de tocino. Poner papel de hornear sobre la placa del horno y colocar las albóndigas envueltas. Hornear 20 minutos. (Antiguamente se freían).
La salsa. Picar la cebolla y sofreír en aceite de oliva, añadir el tomate y dejar espesar un poco, añadir el caldo y pimienta negra molida y sal. Remover y dejar hervir. Mientras sacar las albóndigas del horno, estarán doraditas y añadirlas a la salsa. Dejar cocer hasta que la salsa reduzca. Servir caliente.

Relato y fotografías @catypol - Circus day.