27 noviembre 2016

Agujas de pollo
—Teresa, baja a la panadería a por unas agujas de pollo, por favor —dijo doña Emilia.
—Sí, señora, ahora mismo —respondió Teresa.

Entonces, Teresa se quitaba el mandil y volaba escaleras abajo hacia la panadería. Allí estaba él, Nicolás. Se encargaba de que al horno no le faltara leña, de que el pan no se quemara, de que todo se cociera en su punto... y de piropearla cada vez que ella entraba por la puerta trasera, como hacían las criadas de la zona.

Pero allí también estaba doña Francisca, la encargada de rellenar empanadas, pasteles y, por supuesto, las deliciosas agujas de pollo. ¡Qué mala leche se gastaba la señora!

—¿Qué, ya estás aquí otra vez? —le preguntaba siempre, mirando de reojo a Nicolás.
Sí, doña Francisca. Mi señora me envía a por agujas de pollo —le contestaba Teresa, más roja que un tomate.
—Pues ponte a la cola, bonita, que hoy todas las señoras se han puesto de acuerdo para comerlas —reía doña Francisca con sorna.

A Teresa el corazón le latía con fuerza. Así podría contemplar durante más tiempo a Nicolás. Se puso a la cola de criadas, toda feliz. Roja, pero feliz.

Cuando por fin le tocó el turno, recordó que había salido con tanta prisa que se le había olvidado coger el dinero. Y doña Francisca no fiaba ni a su sombra. Tuvo que bajar la cabeza y salir corriendo, dejando a Nicolás desconcertado.

Al llegar a casa, doña Emilia ya la esperaba con ansia de agujas… y se puso de un humor de perros al saber la verdad.

—Ay, Te-re-si-ta... Si te dieran una aguja de pollo cada vez que piensas en el panadero, no tendrías que bajar a por ellas: ¡las tendríamos por docenas en casa!



A mi me gustan las agujas de pollo, que son las se que venden en las panaderías mallorquinas desde hace mucho tiempo, no sé definirlo en años ni recuerdo la primera vez que las comí pero si que forman parte de mi vida en la isla. 
Lo que más me extraña de ellas es que no hay receta en ningún recetario mallorquín que conozca pero gracias a Lydia del blog Un hervor he conseguido hacerlas, y me siento muy complacida con el resultado, hace mucho que no comía unas agujas de pollo tan buenas, aunque no seas un ansias como yo, déjalas enfriar que es cuando se nota todo su sabor.

Para ello, ella usa una masa de hojaldre casera, yo no dispongo de ella ni tiempo para hacerla pero me decidí a cocinarlas por que encontré una masa de hojaldre de 196 capas y me sedujo probarla, espero un día poder hacerla yo y volveré a cocinarlos totalmente caseros.



· AGUJAS DE POLLO ·

Ingredientes para 6

Necesitarás 6 moldes alargados de unos 14,5 cm.
1 plancha de hojaldre

Para el relleno
  • 130 gramos de pollo asado, picado
  • 2 huevos cocidos 
  • 1 cebolla pequeña, picada
  • 300 mililitros de leche
  • 1 cucharada de harina
  • Sal al gusto
  • Pimienta negra molida
  • 2 cucharadas de aceite de oliva 

Precalienta el horno a 180 °C

El relleno.
  1. En una sartén, calienta el aceite y pocha la cebolla hasta que esté transparente. 
  2. Retira del fuego, añade la harina y remueve enseguida para que se integre bien con la cebolla.
  3. Vierte la leche poco a poco, remueve constantemente para evitar grumos, y vuelve a poner la sartén al fuego. 
  4. Salpimienta al gusto y continua removiendo hasta que la mezcla comience a hervir y espese ligeramente.
  5. Añade el pollo picado, mezcla bien y, tras el segundo hervor, apaga el fuego.
  6. Pica los huevos cocidos y agrégalos a la bechamel. 
  7. Reserva.

Montaje.
  1. Estira la plancha de hojaldre. 
  2. Como los moldes son alargados, recorta rectángulos que encajen en ellos. 
  3. Forra los moldes con el hojaldre, presionando con la yema de los dedos en las esquinas y el fondo. 
  4. Recorta la masa sobrante a ras del borde.
  5. Rellena cada molde con la bechamel de pollo. 
  6. Decora la parte superior con unas tiras de hojaldre en forma de “X”.
  7. Hornea durante 45 minutos, o hasta que el hojaldre esté dorado y crujiente.
  8. Deja enfriar completamente antes de desmoldar y servir.


Relato y fotografías @catypol - Circus day

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23 comentarios. ¿te animas?:

  1. No tenía ni idea de que era hasta que he leído la receta. Y me han encantado. No me extraña que no puedas esperar a que se enfríen!! Besos

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  2. Me comía una aguja de estas ahora mismo, que acabo de llegar de machacarme (total pa nada), y lo que me da es mas hambre...y me encuentro con esto...Dios Caty.....tengo que graparme la boca o formatear mi cerebro..jiji
    Besos reina y FELIZ SEMANA
    Marialuisa

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    1. Ay, el gimnasio, yo también voy cada día y espero un día de estos que me luzca por que hasta ahora puaj!...yo también me formateraré, jajajaja. Besos

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  3. Me comía una ahoramismo!!! Me encantan, besotes

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  4. Hola guapísima !!!
    Ayyyy esa Teresita, si es cierto que cuando anda una enamoriscada la cabeza anda entretenida :) . . . o así lo recuerdo al menos jajaja
    No conocía las agujas de pollo Caty, las he comido siempre de ternera. Pero tengo que probarlas, son muy diferentes a las que hago y tienen que estar bien ricas. Como mis moldes no son tan grandotes, me volveré una ansias al cuadrado y las comeré de dos en dos.
    El hojaldre de Buitoni no lo he visto nunca, y eso de no tener grasas raras siempre conviene. Estaré atenta.
    Te han quedado de rechupetear hasta los moldes.
    Besotes mi niña, feliz semana.

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    1. Ay, mini agujas, es ideal (love), conozco las de ternera, pero aquí no las hacen, igual es una derivación ;). Besitos

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  5. No las conocía ni comí nunca, pero de ya te digo que me encantarían, aunque no las hiciera el panadero de Teresita, jeje. Besiños.

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    1. jajajajaja, pues seguro que te gustarían. Besiños

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  6. Me encanta¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡

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  7. Pues el panadero no sé cómo estará, pero las agujas de pollo se ven súper ricas!! :D
    besos

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  8. Caty, me da pena de Teresa ante semejantes paisanas,jaja, al menos el Nicolás le hace caso, jajaj, no he probado las agujas, las tuyas están perfectas, esos moldes son preciosos, me gusta mucho la receta, además reciclas el pollo asado, me animo seguro, bssss

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    1. Esos moldes no son fáciles de encontrar, mecachis!...el pollo es lo más reciclado en casa, jajajajaja. Besitos

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  9. Aquestes agulles són amor del bo, com el de na Teresa i Nicolàs. I ara ja m'has creat una necessitat, posaré a la llista de necessito sí o sí aquests motllos tan bonics!!! Tinc uns però son molt petitons i sortirien agulletes XD
    A casa fem una cosa similar que en diem llescretes (paraula inventada per un dels bessons) que consisteix en untar llesques de pa amb la beixamel de fer croquetes, posar-hi una mica d'emental pel damunt i gratinar. Però aquestes barquetes de pasta de full són nivell superior ;-)
    Un petonàs

    Blanca

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    1. Gràcies guapa, agulles o agulletes segur que te sortirien molt bones, un petonàs

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  10. Que buena esas agujas mallorquinas, no me extraña que te gusten tanto, tienen una pintaza increíble, una buena solución para la cena, no conozco ese hojaldre, si lo he visto pero no comprado, lo tendré que probar.
    Un besazo y me las llevo.

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    1. Fijaté en la sección de refrigerados, éste o el de Casa Tarradellas es ideal. Besitos

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  11. Cómo me gustan estas recetas típicas de un lugar, de las que se encuentran de toda la vida en los hornos y panaderías, y con recetas que pasan de generación en generación alimentando nuestros recuerdos :). No sé cómo serán las "originales" pero las tuyas tienen una pintaza! No tienen mucho que ver, pero me han recordado a los pasteles de carne y los de cierva de Murcia, que también asocio mucho con mi infancia.

    Un abrazo

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  12. No me extraña que nos hayas mostrado el proceso de comerlas, Caty, y que no puedas esperar a que se enfríen porque deben estar riquísimas ¡Voy a probar a hacerlas!

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  13. Ainss si es que no puede ser, a quién se le ocurre tener un blog de cocina ?? jajajaja , tendría que tener uno de costura que eso no engorda.

    Que maravilla de aguja mi reina, me encanta, me chifla, las que yo he comido nunca han llevado bechamel, eran con pisto, pero ... vamos, a mi dame una de cada y yo tan feliz.

    Besazosss

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