Señoras y Señores,

Bienvenidos a Circus Day

image
Hola,

Soy Caty y dirijo este circo

Foodie, diseñadora gráfica, cuentacuentos y aficionada a la fotografía es un resumen de lo que encontrarás aquí, un circo lleno de recetas, historias y espectáculo. Señoras y señores, mesdames et messieurs, ladies and gentlemen, bienvenidos a Circus day, espero que te guste el show.

The Show

En el blog

Kürtöskalács

En un pueblo donde las chimeneas escupen más confeti que humo y los semáforos hacen sonidos de trompeta cuando cambian de color, vivía la señora Brígida, que juraba ser prima lejana de Mary Poppins, aunque nadie supiera de qué lado de la familia. Una mañana helada pero con sol, la señora Brígida salió a pasear sobre su cama voladora, vestida con su sombrero de flores, un paraguas con luz LED y un abrigo que parecía robado a un sofá del siglo XIX. Desde arriba, saludaba a todos como si fuera la reina de una feria de pueblo.

Debajo, en la pista de hielo del parque, un grupo de niños jugaba a lanzar dados de colores que, por alguna razón, decidían la coreografía de patinaje. Un cuatro rojo implicaba triple giro, un seis azul exigía cantar mientras girabas. Caídas y carcajadas por igual. En el quiosco de la esquina, se vendían Kürtöskalács, esos dulces húngaros en espiral que olían a gloria celestial con canela. Ese día, uno se escapó. Literalmente. Salió volando de las manos de una turista alemana y empezó a girar sobre sí mismo como un donut poseído. Fue entonces cuando aparecieron los pájaros del campanario, volando hacia él.

La señora Brígida, viendo el dulce fugitivo, decidió intervenir: giró su cama voladora, bajó en picado, y lo atrapó justo antes de que se metiera en el saxofón de la banda municipal que ensayaba en la plaza. Aterrizó con aplausos y un modesto “de nada, queridos”, mientras los pájaros le dedicaban un trino maléfico.




Nos vamos a ir a la comida callejera de Hungría, a sus dulces originarios de Transilvania y que se hicieron tan populares que se extendieron a los mercados, su nombre que significa pastelillo de chimenea viene dado porque el humo atravesaba los pastelillos y salía por arriba, igual que una chimenea. El otro nombre conocido es el de Kürtöskalács, seguro que cuando paseáis por ferias o mercados se pueden ver puestecitos en los que se elaboran estos pasteles, con unos palitos de madera y cocidos a la brasa, rebozados de azúcar, canela, cacao, semillas de amapola o frutos secos.

Y esta es mi aportación al juego que nuestra querida Juana nos propone para el concurso comida callejera del mundo. Nunca he estado en Hungría, pero desde hace mucho tiempo me sentí atraída por esta elaboración aunque yo no tengo los artilugios para hacerlo igual que ellos, si tengo otra forma y resulta que salen muy bien.  

· KÜRTÖSKALÁCS ·

Ingredientes (para 6 de tamaño medio)

  • 375 gramos de harina
  • 15 gramos de levadura fresca
  • 2 cucharadas de azúcar
  • 1 pizca de sal
  • 3 cucharadas de aceite de oliva
  • 1 huevo grande
  • 130 mililitros de leche tibia
La masa.
  1. Mezcla en un cuenco la leche tibia, el azúcar y la levadura, remueve hasta su disolución. 
  2. En otro cuenco de la amasadora mezcla la harina, la sal, el aceite, y el huevo. 
  3. Por último mezcla la leche con los otros ingredientes. 
  4. Amasa unos minutos hasta que la masa se haya integrado bien y no se pegue. 
  5. Forma una bola y déjala reposar hasta que doble el volumen.
  6. Cuando la masa esté crecida estírala con un rodillo y con un cortador de pizza separa una cinta larga.
  7. Precalienta el horno a 200 ºC, sólo la placa de abajo y el ventilador, no hace falta la parte de arriba del horno. 
  8. Forra con papel de aluminio, un palo tan grueso o parecido al rodillo de madera de cocina. 
  9. Engrasa igual con aceite y empezando por un extremo envuelve la masa alrededor del palo, pinta la masa con aceite y después hazla rodar sobre azúcar para que se impregne bien. 
  10. Pon el palo de aluminio con la masa en vertical sobre la placa de horno y entre 5 - 10 minutos.
  11. Una vez que el pastelito está cocinado pero aún caliente, pásalo rodando sobre el sabor que más te guste: cacao, canela, vainilla, semillas de amapola, frutos secos picados...





Relato y fotografías @catypol - Circus day.

¿Estás buscando algo en especial?

Contacta conmigo